Sánchez mantiene con un sueldo de 75.000 € al ex alcalde de Sevilla que permitió las mordidas del PSOE

Alfredo Sánchez Monteseirín fue el alcalde socialista de Sevilla entre 1999 y 2011, tiempo en el que se llevaron a cabo los pagos ilegales de la empresa Fitonovo a políticos del PSOE e IU (partidos que formaban gobierno en la capital hispalense) a cambio de adjudicaciones. Teléfonos móviles, coches, 70.000 euros en cajas de zapatos… Las dádivas a funcionarios y políticos socialistas eran más que habituales en el tiempo en el que Monteseirín era el mandamás en el consistorio sevillano. Sin embargo, pese al escándalo que están suponiendo las declaraciones de sus propios consejeros, que admiten este corrupto modus operandi, el Gobierno de Pedro Sánchez mantiene a Monteseirín como alto cargo del Ejecutivo socialcomunista, donde percibe un sueldo de más de 75.000 euros al año.

Monteseirín, de este modo, permanece en el cargo en el que le colocó el propio Sánchez en 2018, es decir, como delegado especial de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en el Consorcio de la Zona Franca de Sevilla. Muchos podrían decir: «Bueno, quizás esté haciendo bien su trabajo». Como respuesta a esta posibilidad un simple dato: apenas un año después de llegar, Monteseirín tuvo que comunicar al Ejecutivo socialcomunista de Pedro Sánchez que el Consorcio estaba en causa de disolución porque ya rondaba un déficit de un millón de euros. Según fuentes conocedoras de aquella situación, todo sucedió porque Monteseirín se lio a firmar contratos menores que la estructura de la Zona Franca de Sevilla no podía soportar.

Sea como fuere, lo cierto es que Monteseirín sigue en su cargo y que, según fuentes del PSOE, seguirá en ese puesto a no ser que sea condenado. Por el momento aún queda bastante para que los juzgados condenen a los socialistas en firme; pero lo que ya sabemos es que, tal y como ha admitido la propia cúpula de la empresa Fitonovo, un concejal del PSOE de Sevilla y el propio asesor de Monteseirín en el Ayuntamiento cuando éste era alcalde, tanto políticos de IU como del PSOE recibieron ingentes cantidades de dinero que, en muchas ocasiones, fueron a parar a los partidos.

Responsabilidad de Monteseirín

Pese a que Monteseirín, por el momento, no está imputado en el caso Fitonovo, lo cierto es que llama mucho la atención que quien fuera entonces alcalde de Sevilla no supiera, por ejemplo, del rápido enriquecimiento de quien era su mano derecha, Domingo Enrique Castaño. Este asesor del PSOE de Sevilla era conocido como Quique y fue el hilo del que tiró la juez Mercedes Alaya para sacar a la luz la corrupción socialista mientras Monteseirín estuvo al frente del consistorio sevillano (1999-2011).

La magistrada no vio normal el fugaz enriquecimiento de Castaño, quien, pese a ser un simple asesor del grupo municipal socialista pasó en sólo seis años de tener 200.000 euros a acumular más de un millón en el último año de Monteseirín como alcalde de Sevilla.

El enriquecimiento de este tal Quique hizo que Alaya se pusiera a investigar. No era normal que Castaño pasara de tener aquellos 200.000 euros al millón de euros; pero tampoco que pasara en sólo seis años de ostentar un piso normal a una casa en el centro de Sevilla, un chalet en la urbanización de lujo Hato Verde y hasta dos plazas de garaje.

Además, entre el patrimonio investigado a Castaño se encontró un Audi 4 Avant, que terminó siendo un regalo de los responsables de la empresa Fitonovo para lograr más adjudicaciones por parte del Ayuntamiento socialista de Sevilla.