Torra se olvida de los CDR y se queja a Cunillera de «una oleada de ataques fascistas»
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha pedido este lunes a la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera, que se convoque de forma «urgente» la Junta de Seguridad, en la que participan Generalitat, Estado y los cuerpos de seguridad. Torra se ha hecho la víctima ante la delegada del Gobierno por el «crecimiento de los ataques fascistas en Cataluña».
Lo ha explicado la portavoz del Govern, Elsa Artadi, tras la reunión que Torra y Cunillera han mantenido en el Palau de la Generalitat, y ha argumentado que el presidente catalán quiere que esta reunión sirva para abordar cómo hacer frente al «crecimiento de los ataques fascistas en Cataluña».
Esta petición se produce después del incidente de este domingo en Vic (Barcelona), cuando un conductor arrolló con su coche unas cruces amarillas que se habían colocado en una plaza de la ciudad –cerrada al tráfico– en solidaridad con los presos soberanistas.
Torra también quiere esta reunión por otros dos motivos: porque existe un nivel cuatro sobre cinco de amenaza terrorista y porque considera que el Estado no ha cumplido con la mayoría de los compromisos que asumió en la última reunión de la Junta de Seguridad hace un año.
Artadi ha recordado que la Junta se celebró en julio de 2017 a petición del entonces presidente Carles Puigdemont –y tras siete años sin haberse reunido–, y ha criticado que el Gobierno central asumió unos compromisos cuyo nivel de cumplimiento ha sido «ínfimo».
Acuerdos pendientes
El Govern ha pedido a Cunillera que traslade esta petición al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, para que se pueda cerrar una fecha para la reunión cuanto antes, y la Generalitat ha pedido «máxima prioridad» en este asunto.
Artadi ha defendido que el Estado adeuda a la Generalitat 700 millones de euros por el despliegue de los Mossos d’Esquadra; ha lamentado que está pendiente mejorar la colaboración en materia de compartir datos estadísticos de criminalidad y también en cuanto al seguimiento de casos de violencia de género.
El Govern también ve incumplido el compromiso para incluir a los Mossos en el convenio de aplicación de acuerdo Schengen para las persecuciones transfronterizas «en caliente», y habilitar a la policía catalana para que pueda participar en el intercambio de información con otras policías europeas.
La portavoz ha considerado que el único «mínimo avance» que se ha producido respecto a la reunión de hace un año es la coordinación de los Mossos con el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (Citco).
En una comparecencia ante los medios anterior, la propia Cunillera ha confirmado haber recibido esta petición de Torra y ha asegurado que hablará con el ministro para ver como todas las partes se pueden poner «de acuerdo».
Jord Borrás
Torra también ha pedido que el Gobierno actúe con celeridad respecto a la agresión al fotoperiodista Jordi Borràs: la Generalitat ve probado según testigos presenciales que no fue una pelea, sino una «agresión» ejecutada por un policía nacional que se identificó como tal.
«Reclamamos que se abra un expediente y se ponga –al agresor– a disposición judicial. La información que tenemos es que no tenemos constancia de que se haya hecho», ha concluido la también consellera de Presidencia de la Generalitat.
Aeropuerto e inmigrantes
El Govern también ha pedido a Cunillera que trabaje para evitar los colapsos en el Aeropuerto de El Prat, y le ha reclamado de nuevo la gestión descentralizada de esta infraestructura, ahora que hay un nuevo director –el catalán Maurici Lucena– que «comprende perfectamente esta necesidad».
También ha pedido al Gobierno central mayor información sobre la llegada a Cataluña de «autobuses de inmigrantes desde la frontera sur» para que así la Generalitat pueda actuar con un mínimo de previsión y poder atender a todas estas personas.