Mia Farrow «entiende perfectamente» a los actores que siguen trabajando con Woody Allen
La guerra mediática entre Farrow y su ex pareja lleva años intentando cancelar al director.
Woody Allen no sabe si volverá a dirigir: «Todo el romance del cine se ha ido»
Las películas favoritas de los mejores directores de cine
Woody Allen cumple 86 años: 5 de sus películas indispensables que podemos encontrar en Filmin
Hace algunos meses, Woody Allen se quejaba de la pérdida de romanticismo por el cine. Aunque eso, no quiere decir que el ganador del Oscar vaya a mermar su inquebrantable ritmo de trabajo. Eso sí, el responsable de Annie Hall (1977) o Manhattan (1979) hace tiempo que no encuentra facilidades en el desarrollo de sus filmes, debido principalmente al conflicto interminable y complejo que enfrenta con su ex pareja Mia Farrow y las acusaciones de abuso sexual hacia Dylan Farrow, la hija adoptiva de esta. Sin embargo y alejada de la radicalidad con la que siempre se expresa en torno al cineasta neoyorquino, la actriz acaba de sorprender con unas declaraciones en las que asegura comprender la decisión de los intérpretes que siguen trabajando con el director.
Las acusaciones contra el cineasta neoyorquino se remontan a 1992, en medio de la ya de por sí polémica relación de este con Soon-Yi Previn, la otra hija adoptiva de Farrow. Ya desde aquel momento, la carrera de Allen se vio empañada en cierta medida por ambos casos, pero en aquella época todavía no se había instaurado el fenómeno de la cancelación, por lo que el director siguió construyendo una filmografía de grandes títulos. Todo esto sucedía siendo Dylan una niña, pero el tema se reabrió otra vez en 2018 cuando ya siendo adulta, desató la caja de Pandora acusando abiertamente al realizador. Allen volvió a negarlo todo y sin embargo, a partir de este revuelo, fueron muchos los miembros del mundo de la interpretación que se apresuraron a dictar sentencia y arrepentimiento de su colaboración con la estrella del celuloide. Desde Kate Winslet a Timothée Chalamet, quien lo hizo para proteger su nominación al Oscar por Call me by your name. Por ello y a pesar de todo, actores menos mediáticos han seguido colaborando con Allen. una situación que Farrow «entiende perfectamente».
Un horizonte peliagudo para el cineasta
Sin dejar de lado su reciente desencanto taciturno con el séptimo arte, Woody Allen tranquilizó a sus fans en 2022, asegurando que no se retiraría pronto y en 2023, estrenó la valorada Golpe de suerte. Filme francés que supuso el largometraje número 50 de su carrera y donde contó con perfiles actorales menos internacionales que en sus anteriores historias. La cinta, estuvo protagonizada por Lou de Laâge, Niels Schneider y Melvil Poupaud. Nombres que contrastan radicalmente con la ristra de estrellas que tuvo a sus órdenes en Día de lluvia en Nueva York, donde encontramos además de a Chalamet, a Elle Fanning, Selena Gomez, Jude Law, Diego Luna, Liev Schreiber, Annaleigh Ashford y Rebecca Hall.
No obstante, Mia Farrow no ha querido poner el foco en la profesión actoral que escoge trabajar para su enemigo público número uno:
«Entiendo perfectamente que un actor decida trabajar con él. No soy de los que dicen ‘No deberían hacerlo’», explicaba en el programa de la CBS, Sunday Morning. Puede que el talento de Allen haya seguido proyectándose incluso con el poder del espectáculo en contra, pero no deja de ser cierto que su trabajo no ha podido obtener una distribución internacional acorde a su estatus. Independientemente de ello, el también guionista y actor obtuvo un buen espaldarazo por parte de Alberto Barbera, el director del Festival de Cine de Venecia. Este, le echó un capote a la presunción de inocencia defendiendo poder mostrar los trabajos de los cineastas que no han sido declarados culpables dentro del certamen italiano.
«¿Por qué razón deberíamos prohibir una película de Allen y (Luc) Besson cuando no son culpables ante la justicia? ¿Por qué deberíamos ser más estrictos con ellos? Necesitamos tener fe en el sistema judicial», le señalaba Barbera a The Guardian hace más de un año. El responsable de uno de los festivales más importante del mundo matizó lo perplejo y «absolutamente increíble» que le parecía que las películas de Allen ya no se pudiesen estrenar en Estados Unidos.
Mia Farrow: su carrera tras Woody Allen
En 1994, Mia Farrow estrenó la encomiable El pico de las viudas, pero lo cierto es que su carrera tras ser la musa indiscutible de Woody Allen fue cuesta abajo. Su última colaboración se remonta a 1992 con Maridos y mujeres y desgraciadamente para su ego, no se puede explicar su trayectoria como actriz sin mencionar que sus mejores trabajos surgieron gracias a la creatividad de su ex pareja. Hannah y sus hermanas, La rosa púrpura del Cairo, Delitos y faltas, Días de radio, Zelig…grandes producciones del director que la encumbraron como una de las grandes actrices de los 80. Por otro lado, no podemos pasar por alto que bajo la mirada de Roman Polanski, Farrow protagonizó La semilla del diablo en 1968, considerada por muchos como la mejor historia de terror del celuloide.
En los últimos años, Mia Farrow se ha centrado en el terreno del documental donde ha destacado peyorativamente su desempeño en la partidista miniserie de HBO Max, Allen v. Farrow. En 2022 formó parte de la exitosa serie de Netflix, Vigilante.