Magrebíes se burlan en las redes del ataque en el que han herido a 5 policías en Bañolas (Gerona)
Tres mossos y dos policías necesitaron atención médica
Magrebíes se burlan en las redes del ataque en el que hirieron a 5 policías en Bañolas (Gerona). Los vídeos incluyen insultos y burlas a los agentes. Los policías habían descubierto una plantación de marihuana, cuando más de sesenta jóvenes magrebíes les atacaron con palos y piedras. Dos de los agresores fueron detenidos durante los disturbios.
Los hechos han tenido lugar en la tarde de éste martes, cuando un vecino avisó a la Policía de la existencia de una pequeña plantación de marihuana en un aparcamiento subterráneo de la Plaza de la Paz.
Se trataba de un pequeño grupo de una decena de plantas pendientes de un foco de luz y calor, pero al ver llegar a la Policía al lugar, los ánimos se han ido calentando hasta el punto en que cerca de sesenta jóvenes, la mayoría de origen marroquí, han atacado violentamente a los agentes en este barrio de La Farga.
Spray de pimienta
En cuestión de minutos, una lluvia de piedras y palos han caído sobre los Mossos d’Esquadra y la Policía Local del municipio, hiriendo a cinco de ellos. Los protagonistas del ataque a los policías incluso han llegado a rociara con espray de pimienta a los agentes en la cara, llegando a lesionar a uno de ellos.
Tras un buen rato de refriega, los Mossos pidieron refuerzos y se enviaron varios equipos de antidisturbios de los ARRO que finalmente consiguieron acabar con la revuelta.
Durante el ataque a los policías, los Mossos consiguieron detener a dos de los agresores, acusados de atentado a la autoridad. Ahora, la Policía trabaja en la identificación del resto de participantes en los altercados que agredieron a los agentes.
Igualmente, se han recogido diferentes publicaciones en vídeo en las redes sociales en las que se burlan de los Mossos d’Esquadra. Las imágenes distribuidas en varias plataformas, como las que acompañan ésta información, incluyen burlas e insultos a la Policía como «Fock the Police» (en referencia a la palabra fuck del inglés).
Ataque a martillazos
Entre este último altercado con jóvenes magrebíes en Gerona y el anterior sólo medían diez días de diferencia. El día 9 de marzo la Policía Local de Gerona ya detuvo a dos marroquíes reincidentes acusados de atacar a martillazos y porrazos a cuatro personas con extrema violencia. El objeto del ataque era robar los teléfono móviles y abrigos de las víctimas.
Los hechos tuvieron lugar hacia las siete y cuarto de la mañana en la Gran Vía de Jaume I de la ciudad de Gerona. Allí, los ladrones atacaron por sorpresa y martillo en mano a un grupo de cuatro jóvenes, exigiéndoles sus pertenencias. Las víctimas resultaron heridas de carácter leve y los ladrones marroquíes les robaron una chaqueta y un teléfono móvil.
Avisados con rapidez, los Mossos d’Esquadra y policías locales de la ciudad comenzaron la búsqueda de los dos ladrones, que gracias a los testimonios de las víctimas fueron reconocidos y arrestados en las cercanías del asalto.
Entre tanto, las cuatro víctimas recibieron asistencia de los servicios sanitarios y fueron trasladados al hospital de Gerona ya que presentaban heridas leves a causa de los martillazos que habían recibido.
Los arrestados, que acumulan numerosos antecedentes policiales, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Gerona.
Ataque en Tarragona
Otro ataque multitudinario a policías se vivió el pasado domingo en Tarragona. Allí un centenar de magrebíes atacó a los Mossos d’Esquadra cuando intentaban impedir una okupación el el barrio de Torreforta de la ciudad. Los agresores llegaron a arrinconar a los policías que tuvieron que pedir refuerzos y se vieron obligados a sacar sus armas de fuego para intimidar a los magrebíes.
La patrulla de los Mossos sorprendió a dos jóvenes cuando intentaban forzar la puerta de una vivienda para ocuparla de forma ilegal. Al detenerlos, una turba de decenas de jóvenes la mayoría de origen magrebí comenzó a increpar a los agentes y a lanzarles todo tipo de objetos para que soltaran a los dos arrestados.
La situación alcanzó tales cotas de tensión que los policías se vieron obligados a pedir refuerzos, viéndose rodeados por casi un centenar de personas que comenzaron a provocar disturbios en la zona.
Los policías, con ayuda de sus compañeros de los antidisturbios de los ARRO tardaron más de una hora en controlar la situación que se saldó con un detenido y ningún agente herido.