Si tengo Helicobacter pylori: ¿qué puedo comer y qué debo evitar para mejorar mi bienestar?

helicobacter pylori
Helicobacter. @Istock

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Atender a los dolores de estómago continuados es importante para saber si estamos ante algo más grave que una indigestión. Y es que, aunque hay que hacer las pruebas adecuadas para dar con el diagnóstico, podemos estar ante la conocida infección provocada por la Helicobacter pylori, una bacteria que infecta la mucosa del epitelio gástrico humano.

Debemos tener en cuenta que el fluido gástrico humano está compuesto por enzimas digestivas, así como de ácido hidro-clorhídrico, unas sustancias que destruyen la mayoría de las bacterias y virus, con excepción de la Helicobacter pylori, que es una de las que tiene la capacidad de vivir en este contexto

Esta bacteria, explica Belén Fontán, especialista en Nutrición y Dietética del Complejo Hospitalario Ruber Juan Bravo de Madrid, infecta sobre todo el revestimiento del estómago, aunque también se puede encontrar en las heces, la saliva y la placa dental.

Esta infección es una de las causas más frecuente de gastritis y de úlcera gastroduodenal. Indica la especialista, en este sentido, que se trata de una bacteria muy resistente, y los síntomas que puede manifestar son diversos:

.- Reflujo en la parte superior del abdomen
.- Hinchazón o inflamación estomacal
.- Saciedad muy temprana con poca cantidad de alimento ingerido
.- Náuseas o vómitos
.- Astenia y/o debilidad
.- Pérdida de peso
.- Heces oscuras

¿Cómo nos infectamos y qué tratamiento hay?

«Las infecciones por Helicobacter pylori se pueden transmitir de persona a persona, especialmente si las personas infectadas no se lavan las manos minuciosamente después de cada deposición», detalla Fontán.

Por tanto, para atajar el problema una vez que la bacteria ha aparecido, la especialista asegura que «es muy importante asociar una correcta pauta farmacológica con inhibidores de la bomba de protones para disminuir la producción de ácido del estómago, así como antibióticos para eliminar la bacteria».

También destaca que será de gran importancia para el bienestar del paciente el cuidado de sus mucosas, donde juega un papel importante la dieta. «El bienestar de los pacientes con Helicobacter pylori, tanto en la fase de tratamiento como tras el tratamiento farmacológico, está directamente relacionado con el cuidado de la alimentación», comenta Fontán.

La importancia de la dieta para el bienestar

Una dieta adecuada disminuye mucho la sintomatología causada por esta bacteria, por lo que es de vital importancia saber que no debemos consumir si nos han diagnosticado la presencia de Helicobacter Pylori estos alimentos y bebidas. «Estos productos favorecen la irritación de las mucosas, por lo que empeorarán los síntomas», comenta.

.- Té y café
.- Refrescos
.- Alcohol
.- Embutidos y quesos muy curados
.- Alimentos ultraprocesados
.- Alimentos muy fríos o muy calientes
.- Alimentos muy condimentados
.- Alimentos muy tostados
.- Especias irritantes como la pimienta.

Por otro lado, también indica que es importante favorecer la digestión de los pacientes diagnosticados con Helicobacter Pylori para mejorar la hinchazón, el reflujo, así como el malestar digestivo general. «Por este motivo, en la intervención nutricional tendemos a eliminar o disminuir el consumo de alimentos que, siendo saludables, no conviene incorporar durante el tratamiento de la bacteria por su repercusión a nivel digestivo, si bien estos alimentos deben ir reincorporándose a la dieta del paciente de manera progresiva y en función de la tolerancia de este», explica la especialista en Nutrición y Dietética del Complejo Hospitalario Ruber Juan Bravo de Madrid.

Algunos de estos productos sanos y saludables que deben apartar de su alimentación los pacientes que tienen esta bacteria son, por ejemplo, «las legumbres y cereales integrales, los frutos secos (por su alto contenido en grasas es de más difícil digestión), las frutas y verduras crudas o el pescado azul». No obstante, asegura Fontán, «esta restricción debería hacerse bajo vigilancia de un nutricionista para evitar déficits nutricionales». 

Alimentos indicados en la dieta

Por otro lado, y teniendo en cuenta que se trata de un tratamiento temporal, sí que hay alimentos que podemos tener en nuestro día a día por ser saludables e indicados en estos casos.

.- Frutas y verduras hervidas
.- Carnes blancas como pollo, conejo o pavo
.- Pescado blanco
.- Yogurt natural y queso fresco
.- Lenteja pelada
.- Aceite de oliva y aguacate en cantidades moderadas

«La Helicobacter pylori se caracteriza por producir amoniaco como método de protección. Por ello, en la medida de lo posible recomendamos también, y en función de la sintomatología del paciente, despurinizar carnes y almidones, es decir, hervir carnes aproximadamente durante 10 minutos o tostar el pan, por ejemplo», indica la especialista en nutrición.

Apunta, además, que no sólo la alimentación y la farmacología ayudan a la erradicación de esta bacteria. Es importante tener en cuenta nuestro estilo de vida. Dentro de los factores que podemos cambiar para mejorar la sintomatología, debemos tener en cuenta estos consejos:

1.- Evitar comidas abundantes, repartiendo la ingesta en 5-6 tomas.
2.- Comer despacio y realizar cocinados sencillos.
3.- Reposar sentado media hora después de las comidas principales.
4.- Beber suficiente cantidad de agua, en pequeñas cantidades, fuera de las comidas, 30 o 60 minutos antes o después. Evite los zumos de naranja, tomate y las bebidas gaseosas.
5.- Evitar temperaturas extremas, es decir, que los alimentos y bebidas estén templados.

«Desde la consulta de nutrición no podemos erradicar la bacteria Helicobacter Pylori, pero sí podemos hacer que la sintomatología causada por la infección mejore y, con ello, la calidad de vida de nuestros pacientes», concluye Fontán.

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