Seminario MSD

Las personas más vulnerables socialmente son diagnosticadas en etapas más tardías de la enfermedad

Cristina Nadal, Belén Fernández y Manuel Arellano.
Cristina Nadal, Belén Fernández y Manuel Arellano.
Diego Buenosvinos
  • Diego Buenosvinos
  • Toledo
  • Especialista en periodismo de Salud en OKDIARIO; responsable de Comunicación y Prensa en el Colegio de Enfermería de León. Antes, redactor jefe en la Crónica el Mundo de León y colaborador en Onda Cero. Distinguido con la medalla de oro de la Diputación de León por la información y dedicación a la provincia y autor de libros como 'El arte de cuidar'.

Fact checked

×

Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.

La compañía biofarmacéutica MSD, en colaboración con La Fundación Gaspar Casal, que ha organizado un encuentro de debate con el objetivo de dar visibilidad a las inequidades en salud, abordó el viernes en Toledo, en su segunda mesa redonda de la jornada, la ponencia Por una vida no determinada, con la que se retrató, la necesidad de trabajar de manera multidisciplinar la salud de personas con menores recursos y tener en cuenta el entorno del paciente. En este sentido, se resaltó como dato importante la necesidad de figurar este tipo de datos personales en sus historias clínicas para que los equipos les puedan ayudar más y mejor.

La salud y la enfermedad son el resultado de la interacción de diversos factores que trascienden la genética, como por ejemplo la situación socioeconómica, nivel de educación, lugar de residencia y vivienda, entorno laboral, red de relaciones sociales y familiares, así como la capacidad para acceder a los servicios sanitarios.

Se conocen como determinantes sociales en salud (DSS) todos aquellos aspectos que condicionan la existencia de desigualdades con impacto en la salud y en la esperanza de vida de las personas. Así, según el documento Por una salud no determinada. Una Hoja de Ruta hacia la equidad en salud, elaborado por la Fundación Gaspar Casal, se ha observado que las personas con menos acceso a la educación, una ocupación laboral más baja o menores ingresos, suelen padecer más problemas de salud y son más proclives a fallecer en edades más tempranas.

Belén Fernández, responsable del Observatorio de la AECC, ha manifestado que, en el caso de los pacientes con cáncer, “las personas socialmente más vulnerables tienen una mayor probabilidad de ser diagnosticadas en etapas más tardías de la enfermedad, dado que no disponen de información sobre factores de riesgo y no participan en los programas de cribado. Además, tienen mayores dificultades para hacer frente a los costes directos e indirectos derivados de los tratamientos y de llegar a la fase final de la enfermedad sin la oportunidad de tener acceso a cuidados paliativos integrales y de calidad”.

En este sentido, explicó la necesidad de la detención precoz del cáncer con los cribados y que estos tienen una cobertura para todos por igual y los más desfavorecidos deben participar de los mismos. Sabedores también de que
en el caso del cáncer, «y no hablamos de pagar la quimioterapia, tiene numerosos microgastos que suponen un porcentaje muy grande de gastos directos e indirectos que para muchas personas no es fácil asumir».

Finalmente, Manuel Arellano, vicepresidente de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes, ha incidido en que los hábitos saludables son parte de los factores de riesgo para desarrollar cualquier enfermedad: enfermedad renal, diabetes o cáncer. Tal y como ha advertido, un 4 por ciento de la población española se encuentra en situación de pobreza farmacéutica y, a su juicio, es necesario «hablar de salud mucho más que de enfermedad». «Es decir, hay que hablar de prevención, y cuando a no se puede hablar de salud porque ya se ha diagnosticado una enfermedad, hagamos que el paciente sea corresponsable y participe en la eliminación de factores de riego que puedan empeorar el diagnóstico», ha defendido.

Por último, indicó que la sanidad está pensada para agudos, no para crónicos, por lo que hay que cambiar el tratamiento del sistema, ya que, todo el sistema está tensionado. Cierto es que con la participación del paciente pueden bajar los costes sanitarios hasta un 80%.

Lo último en OkSalud

Últimas noticias