Diez años del Banco Regional de Leche Materna: 19.500 litros de leche y 6.550 bebés atendidos
Las madres pueden dirigirse al 12 de Octubre, La Paz, Severo Ochoa, Puerta de Hierro-Majadahonda y Príncipe de Asturias
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El Banco Regional de Leche Materna cumple su primera década de vida habiendo cubierto las necesidades nutricionales de 6.550 bebés prematuros y recién nacidos gracias a la colaboración altruista de 2.261 mujeres que han donado de forma desinteresada más de 19.500 litros.
Los expertos dicen que amamantar al bebé es bueno para la madre y para él. Si amamanta por algún tiempo, no importa lo breve que sea, usted y su bebé se beneficiarán de la lactancia materna. También aseguran que si su bebé es amamantado será menos propenso a enfermar teniendo menos alergias,
infecciones del oído, gases, diarrea y estreñimiento, enfermedades de la piel (tales como eccema), infecciones estomacales o intestinales, enfermedades respiratorias, como la neumonía y la bronquiolitis, diabetes, obesidad o síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL), entre otras.
Así, este dispositivo asistencial, ubicado en el Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, presta servicio a este y otros siete hospitales más (La Paz y Clínico San Carlos, en la capital; Severo Ochoa (Leganés); Puerta de Hierro- Majadahonda; Príncipe de Asturias (Alcalá de Henares); Fundación Alcorcón, y Getafe) y está previsto que en breve se incorpore el Hospital de Móstoles, ha indicado el Gobierno regional en un comunicado.
Siete años antes de su conversión en Regional, el Hospital público Universitario 12 de Octubre abrió su Banco de Leche Materna, siendo el primero de España integrado en un servicio de Neonatología y proporcionando alimento a los bebés ingresados en el propio centro.
En 2011 recibió la acreditación, reconfirmada en 2019, Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia Materna, otorgada por Unicef y la Organización Mundial de la Salud.
Su objetivo es cubrir las necesidades nutricionales que tengan los niños prematuros o recién nacidos enfermos que no puedan ser amamantados por sus propias madres.
Así, las madres que deseen colaborar pueden dirigirse al 12 de Octubre, así como a La Paz, Severo Ochoa, Puerta de Hierro-Majadahonda y Príncipe de Asturias, que están acreditados igualmente para la selección y la recepción de las entregas.
También se puede recoger en los domicilios de las mujeres lactantes, de forma gratuita, gracias a la colaboración de la Fundación Ronald McDonald, que la transporta para su procesamiento, almacenamiento y posterior distribución (en función de las peticiones) al Banco Regional.
Este recurso cuenta con un laboratorio en el que la leche es seleccionada y posteriormente pasteurizada con el fin garantizar su calidad y seguridad.
Asimismo, tiene una gran sala con congeladores de conservación y otra de espera para las donantes. Todos estos procesos cuentan con el certificado de calidad ISO 9001, que ha permitido introducir mejoras significativas en su funcionamiento, en beneficio de la atención que se presta a los pacientes más pequeños.
¿Cómo donar leche materna?
En este marco, la Comunidad de Madrid ha hecho un llamamiento para que las nuevas madres se conviertan en donantes y que, las que ya lo son, refuercen su compromiso porque, a pesar del elevado volumen de entregas, las necesidades de los niños enfermos que no pueden ser amamantados por sus propias progenitoras son continuas.
Este alimento natural está considerado como una verdadera medicina en pacientes pediátricos, ya que se ha demostrado que es siempre la primera y mejor opción para su nutrición, protegiéndoles frente a complicaciones intestinales graves y favoreciendo una mejor evolución cuando presentan patologías respiratorias o de otro tipo.
Los receptores suelen ser los menores de 1.800 gramos o los que nacen con peso muy inferior hasta que alcanzan aproximadamente esa cifra. También lo son otros recién nacidos con riesgo de padecer complicaciones graves, como aquellos que tienen malformaciones en el tubo digestivo, cardiopatías congénitas o se encuentran en situación de extrema gravedad.
Tengo poca leche
Muchas madres expresan preocupación y dudas respecto a si tendrán suficiente leche para alimentar a sus hijos. Pero ahora sabemos que, salvo situaciones excepcionales, las madres producen la cantidad exacta de leche que necesitan sus bebés si el agarre es correcto y la lactancia es a demanda. Cuando una madre cree que tiene poca leche, lo habitual es que se trate de alguno de los siguientes casos:
La posición del niño o el agarre del pecho no es adecuado (ver documento de recomendaciones). Hay leche, pero el bebé no la puede obtener. A la larga, como el bebé no vacía bien las mamas, éstas dejan de producir la cantidad de leche que necesita el bebé. Suele haber dolor al mamar o grietas. Es conveniente corregir la posición y/o el agarre.
Si el bebé apoya su cabeza en el codo de su madre, la madre se ve obligada a desplazar el pecho unos centímetros para que el bebé pueda agarrarlo. Aunque la succión sea potente, el bebé tirará del pezón y le será más difícil obtener la leche con cada succión. Suele haber dolor y/o grietas en la base de los pezones.
Si el bebé no abre completamente la boca para abarcar con ella gran parte de la areola y el pezón o tiene un frenillo lingual corto, hará succiones poco eficaces con lo que estará mucho tiempo succionando porque obtiene solo la leche del principio y no se queda satisfecho. La madre se queja de dolor o grietas en la punta del pezón.
Lo ideal es que alguien experto en lactancia (el pediatra, la matrona, la enfermera del centro de salud o algún grupo de apoyo, ver listado) evalúe la toma y ayude a corregir la postura si no es la adecuada, como asegura la Asociación Española de Pediatría.
El bebé mama menos de 8 veces al día o se limita la duración de la toma. En estos casos, en los que el bebé no mama a demanda, le será difícil tomar toda la leche que necesita.
Hay leche, pero la madre no se nota «la subida» y duda de que tenga suficiente. Las primeras 48 horas el bebé se alimenta del calostro de su madre, pero casi ninguna madre lo ve salir del pecho, incluso apretándoselo. Por otro lado, tras la subida, muy pocas madres notan que la leche sale a chorro o que mojan los empapadores y, sin embargo, la mayoría producen la leche que su bebé necesita. A partir del tercer día, si el bebé mama de forma adecuada, más de 8 veces al día y hace 3 o más deposiciones al día, se está alimentando correctamente.
A medida que va creciendo, el niño tarda menos en hacer las tomas y extrae la leche más eficazmente. Como el cambio se produce bruscamente, muchas madres creen que no se alimenta adecuadamente o que deja el pecho tan pronto porque tienen menos leche. Si el niño está tranquilo y feliz y moja más de 5 pañales diarios, es que está tomando la leche que necesita.