¿Cómo ayudar a tus hijos a elegir amigos?

Los padres deben velar por el sano desarrollo de los niños y niñas que tienen a su cargo, una tarea tan retadora como gratificante. Las satisfacciones se combinan constantemente con las preocupaciones, y cuanto más crecen, las circunstancias se hacen más complejas. ¿Puedes ayudar a tus hijos a elegir amigos? Esta es la clase de preguntas que mamás y papás se hacen en algún momento. En teoría, la respuesta es sí, aunque en la práctica esto quizá no sea lo más importante.

En cualquier caso, sobre la paternidad y la crianza se han escrito millones de libros en todo el mundo. Pero a pesar de ello, no existen fórmulas infalibles. Después de todo, no se trata de programar un sistema informático o configurar un robot. Y como bien se expresa en la sabiduría popular: “cada cabeza es un mundo”.

Cuestión de perspectivas

Para muchos especialistas, más importante que la pregunta ‘cómo ayudar a tus hijos a elegir amigos’ es ‘cómo enseñar valores’. Conocer y aplicar conceptos como respeto o lealtad, junto con muchos otros, es lo más parecido que los padres tienen para ‘configurar’ a sus pequeños.

Si estos términos se convierten en principios inquebrantables, son elementos que de forma natural los niños buscarán encontrar en las personas con quienes comparten su día a día. O lo que es lo mismo, esperarán que sus amigos manejen las mismas ideas.

El reto de predicar con el ejemplo

La comunicación verbal y sincera entre padres e hijos es imprescindible. Es tarea de los primeros propiciar canales de entendimiento fluidos, en donde ningún tema quede oculto bajo la alfombra. Los valores como la confianza y el respeto forman parte de la columna vertical para que estos puentes funciones sin sobresaltos. Sin importar las circunstancias.

Más allá de lo que se dice, para los niños es esencial lo que hacen sus padres. Recurriendo nuevamente a la sabiduría popular, una de las frases más repetidas en el planeta, con versiones en prácticamente todos los idiomas es “de tal palo, tal astilla”. Es decir, los niños imitarán las costumbres y la forma de ser de sus progenitores.

Este es un aspecto casi completamente condicionado a lo que ven y muy poco a lo que escuchan. De allí que, si unos padres quieren ayudar a sus hijos a elegir buenos amigos, antes deben preguntarse si ellos mismos han hecho buenas elecciones. También tienen que revisar cómo interactúan con otras personas, principalmente cuando están siendo observados por los pequeños.

¿Puedes ayudar a tus hijos a elegir amigos?

Nuevamente la respuesta es sí. Dándole elementos para que puedan decidir sabiamente. Señalar con el dedo no es el mejor camino, hay que predicar con el ejemplo, resaltando los valores y principios adecuados. Esto es lo mejor que puedes hacer.