pensiones

La desigualdad crece: la diferencia de las pensiones entre provincias aumenta a 787 euros mensuales

Un jubilado de Vizcaya cobra de media 1.872 euros mensuales, frente a los 1.085 euros de un pensionista de Orense

pensiones, desigualdad
Carlos Ribagorda

La desigualdad en las pensiones de jubilación entre las diferentes provincias del país va en aumento. Según los últimos datos de la Seguridad Social, un jubilado de Vizcaya, en el País Vasco, cobra ya de media 1.872 euros mensuales, frente a los 1.085 euros que cobra de media un pensionista de Orense. La brecha es ya de 787 euros al mes entre las pensiones de jubilación más altas y las más bajas en España.

La diferencia y al desigualdad entre pensiones dependiendo de en qué región se vive va en aumento por tanto pese a los mecanismos correctores que existen en el sistema. Estos mecanismos reducen la desigualdad, pero son claramente ineficaces puesto que en 2020 la brecha entre provincias era de 615 euros al mes.

Cinco años después, la diferencia ha aumentado a los citados 787 euros mensuales, que en 14 pagas suponen una brecha anual de más de 11.000 euros entre un jubilado de Vizcaya y otro de Orense.

Según los expertos, el motivo no es otro que las diferencias en los salarios y en la productividad de las comunidades autónomas. Un reciente estudio de BBVA Research señala que la remuneración media en el País Vasco es un 34% superior a la de Murcia o Extremadura.

Según este informe, la homogeneización del mercado laboral frena en parte las diferencias entre regiones por la productividad. Pero no tiene efecto en la brecha entre las pensiones. El resultado es que la diferencia entre las pensiones es mayor que en el caso de los sueldos, las cotizaciones y la productividad.

Respecto a la media de la pensión de jubilación nacional, hay diez regiones donde la pensión es inferior a la media, 1.511 euros mensuales. Los pensionistas de País Vasco, Asturias y Madrid son los que más cobran de media.

La diferencia entre lo que cobra un pensionista de Extremadura o Galicia con otras regiones del país es uno de los problemas del sistema, aunque está directamente relacionado con las cotizaciones y los sueldos. La brecha entre lo que cobran los hombres y las mujeres es otro problema, que también tiene que ver con las cotizaciones y sueldos, aunque en este caso el Gobierno se muestra más interesado en resolver.

Pero el informe de BBVA Research muestra el que es el grave problema del sistema. Y es que la diferencia entre los ingresos y los gastos del sistema es cada vez mayor -sólo se resuelve por las inyecciones de la Administración central a la Seguridad Social-.

De hecho, a cierre de 2024 ninguna comunidad autónoma es autosuficiente para pagar a sus pensionistas por primera vez. En el caso de Madrid, que en 2022 tenía un balance positivo, ahora si tuviera que pagar las pensiones con las cotizaciones de los madrileños necesitaría más de 1.300 millones extra.

La peor región es Andalucía, donde el agujero supera los 9.000 millones, como muestra el gráfico. Cataluña es la segunda, con casi 8.800 millones de déficit, seguida de País Vasco y Valencia con más de 5.000 millones. El balance global eleva ya a 56.420 millones de euros las necesidades del sistema para poder pagar las pensiones.

Y un problema que se avecina. Si finalmente Cataluña gestiona todos sus impuestos y sale del sistema común significará que con los impuestos del resto de los españoles se financiarán las pensiones de la región, como ahora pasa ya con el País Vasco y Navarra -aunque pagan un cupo general a la caja común para todos los servicios que da el Estado en esas comunidades-.

En estos momentos las pensiones se pueden pagar gracias a las transferencias que hace la Administración central, según aprobó este Gobierno. Las cuantías son cada vez más elevadas pese a la subida de las cotizaciones sociales y el buen momento en el número de afiliados.

Lo último en Economía

Últimas noticias