7 malos hábitos que dañan los dientes
Fact checked
Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.
Hay ciertas actuaciones que pueden resultar muy peligrosas para nuestra dentadura. En algunos casos el daño puede ser inmediato, en forma de fractura, o más a largo plazo en forma de desgaste. No obstante, hay 7 malos hábitos que dañan los dientes y que deberías abandonarlos por el bien de tu salud bucal.
Cepillarse con mucha fuerza
Los expertos aconsejan cepillarse los dientes tres veces al día, sobre todo después de cada comida. Pero en el caso de que lo hagas de una manera muy vigorosa podrías dañarlos. Y es que si te frotas la dentadura con mucha fuerza las encías se acaban irritando, el esmalte se desgasta y aumenta la sensibilidad, entre otras cosas. Por eso, lo mejor es que utilices un cepillo con las cerdas suaves.
Apretar los dientes
Muchas personas a consecuencia del estrés y de la tensión suelen apretar los dientes en exceso. Es mucha la presión que ejercemos sobre la dentura, y lo más probable cuando ocurre esto es que suframos un desgaste muy grande pudiendo llegar a fracturarse las piezas.
Chupar limón
Es posible que la mayoría de las personas no lo sepan, pero cuando se chupa un limón estamos poniendo en serio peligro el estado de nuestros dientes. El motivo es que este cítrico es bastante ácido y acabará ‘quemando’ el esmalte. Si la dentadura se expone durante mucho tiempo a este tipo de sustancias es posible que lleve a acabar por completo con el esmalte.
Empleo de los dientes como herramienta multiusos
Los dientes tienen una utilidad concreta, que es masticar la comida que ingerimos. Por eso todo lo demás que hagas con ellos no resultará precisamente beneficioso. Cometerás un grave error si los utilizas para abrir una bolsa de snacks, abrir el corcho de una botella o romper la etiqueta de una prenda. Ten en cuenta que los dientes no son ni un sacacorchos ni unas tijeras, por lo que su uso debería limitarse mucho más. Las piezas de la boca tienen tres usos distintos, que son masticar la comida, hablar bien y lucir una sonrisa más elegante.
Morder lapiceros
También resulta muy peligroso sujetar o morder con los dientes lapices, bolígrafos o las patillas de las gafas. Esta zona de la boca soporta mucha presión cuando muerde un objeto duro que no es comida. Lo que podemos conseguir es que los dientes se puedan romper o desplazarse.
Abusar de los refrescos
Las bebidas carbonatadas también acaban dañando a nuestros dientes debido a la acidez que tienen, incluso aunque sean sin azúcar. Los efectos serán mucho peores en el caso de que las tomemos en sorbos muy pequeños, ya que existe la posibilidad de estar bañando nuestra dentadura en ácido durante una hora.
Empleo de palillos
A la hora de utilizar los palillos o mondadientes se pueden dañar las encías. Lo mejor para acaba con los restos de comida que se nos quedan entre las piezas es usar la cinta dental y los cepillos interproxímales. Con estos consejos lucirás unos dientes más sanos.