Cristiano y Joao ‘ghanan’ en su debut
La primera vez que Cristiano Ronaldo disputó un evento internacional de selecciones ni Facebook ni Whatsapp ni Instagram existían. Nokia era el teléfono más vendido y Apple todavía no había inventado el Iphone. Estas cosas, que parece que llevan toda la vida con nosotros, no se acercan ni por asomo a la durabilidad de un Cristiano que volvió a mojar en un Mundial.
El portugués abrió la cuenta del duelo entre Portugal y Ghana provocando un penalti que él mismo transformó en el minuto 65. Cristiano y sus chicos, sin embargo, no pudieron mantener la ventaja más que ocho minutos ante el empuje de una Ghana que empató a través de André Ayew tras un fallo de concentración de la defensa lusa.
Cuando todo pintaba feo para ibéricos aparecieron un par de chispazos del enorme talento que atesoran en la figura de un Bruno Fernandes que regaló sendos goles a Joao Félix y a Rafael Leao para encarrilar el partido en dos minutos. El del Atlético se aprovechó de un magistral pase al hueco, mientras que el milanista anotó tras ver cómo su compañero atraía a toda la defensa rival. Ghana pisó algo de incertidumbre al duelo con un gol postrero, pero la sangre no llegó al río para los lusos.
Así jugó Portugal
Portugal tuvo posesiones muy largas en la primera mitad gracias a la calidad que atesoran Bernardo Silva y Bruno Fernandes. Al equipo de Fernando Santos le faltó vértigo en algunos momentos del juego, aunque todo cambió en la segunda mitad cuando Ghana empezó a descuidar sus ayudas defensivas.
Así jugó Ghana
El equipo africano estuvo muy ordenado hasta el gol de Cristiano Ronaldo. Apenas se descompusieron ante las largas posesiones de su rival. Cuando no les quedó más remedio que atacar mostraron colmillo, pero descuidaron la defensa y lo terminaron pagando ante el mayor talento del equipo europeo. Iñaki Williams fue un islote en el ataque que no cazó ninguna contra de valor.
MVP: Bruno Fernandes
El centrocampista del Manchester United dio un recital con dos asistencias de gol excelsas. Después de que muchos cuestionasen el ambiente del equipo y especialmente su relación con Cristiano, esta exhibición de pase deja claro que en Portugal el objetivo es ganar más allá de los egos personales. Bruno dio ejemplo poniendo por delante el colectivo al lucimiento personal. Y eso que mal no le pega al balón.