Cosméticos naturales para cuidarte por dentro
Hay productos naturales cuyo consumo te ayuda a verte mejor por dentro y por fuera
Los productos cosméticos nos ayudan a cuidarnos por fuera gracias a tratar nuestra piel o nuestro cabello, pero también debemos cuidar mucho nuestro interior y no centrarnos únicamente en el exterior. Hoy te recomendamos algunos cosméticos naturales para que te cuides por dentro, alimentos que te ayudarán a mejorar algunas partes de tu estética y que además son saludables.
Cuando te sientes bien por dentro, indudablemente te sientes también bien por fuera, y gracias a esta afirmación nació hace tiempo la nutricosmética, que es la cosmética que se preocupa de cuidar nuestro interior para que se refleje en nuestro exterior.
Cosméticos naturales para cuidarte por dentro y por fuera
Levadura de cerveza
La levadura de cerveza es un complemento muy rico en vitaminas y proteínas, especialmente vitamina B, que ayuda a la formación de queratina. Es muy buena para combatir la caída anormal del cabello o las uñas quebradizas, y por su composición se digiere fácilmente y el organismo la absorbe rápidamente.
Aceite de onagra
Es perfecto para estimular la regeneración celular ya que tiene un alto contenido en vitamina E y F. Contiene también ácido gamma-linolénico, que es idóneo para lograr una piel tersa y sana. El aceite de onagra es muy recomendable para tratar la piel, especialmente aquellas que tengan problemas como acné, eczemas o arrugas.
Té verde
Es uno de los mejores cosméticos naturales y tiene muy buenos efectos sobre el estado de la piel, además de efectos terapéuticos fantásticos. Los polifenoles que contiene el té verde son antioxidantes muy potentes que combaten los radicales libres, por lo que son de gran ayuda para frenar el envejecimientos de la piel e incluso los avances de algunas enfermedades degenerativas.
Betacarotenos
Estos pigmentos vegetales se encuentran en verduras y frutas como el tomate, los albaricoques, el melocotón o la sandía, y son adecuados para proteger la piel de los rayos del sol. También protegen de los radicales libres y frenan el avance de algunas enfermedades degenerativas.