El ‘Le Pen’ ruso que apoya a Puigdemont se lía a puñetazos, elogia a Hitler y pide invadir Alaska

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El proceso de independencia de Cataluña impulsado por Carles Puigdemont no sólo ha obtenido el apoyo de los partidos de extrema derecha de media Europa. También ha recibido el respaldo del Partido Liberal Democrático de Rusia (PLDR) liderado por Vladimir Zhirinovski, quien el pasado día 9 encabezó una manifestación ante el Consulado español en Moscú para apoyar la independencia de Cataluña.

«Queremos mostrarle al Gobierno español y al Rey de España que en Rusia hay muchas personas que apoyan el derecho de los catalanes a vivir independientes bajo su bandera en un Estado independiente: Cataluña», afirmó Zhirinovski durante la concentración, que apenas logró reunir a un puñado de personas.

El nuevo aliado de Puigdemont, Vladimir Zhirinovski, es un antisemita que elogia la política de Adolf Hitler, pide expulsar a todos los inmigrantes de Rusia y aboga por recuperar las fronteras de la URSS mediante alianzas con las antiguas repúblicas soviéticas que hoy son independientes.

También se ha mostrado decidido a recuperar Alaska mediante una invasión militar (la Rusia zarista la vendió a Estados Unidos en 1867) y a usar armas nucleares contra el Reino Unido y contra Chechenia. En 2006 planteó una ingeniosa propuesta para legalizar la poligamia y prohibir que las mujeres en edad fértil salgan del país, con el fin de combatir las bajas tasas de natalidad.

Cataluña
Vladimir Zhirinovski en la manifestación de apoyo a la independencia de Cataluña celebrada el pasado día 9 en Moscú.

Ha sido candidato presidencial cuatro veces y vicepresidente de la Duma durante 12 años, entre 2000 y 2011. Son especialmente célebres las peleas a puñetazos con las que solventa sus diferencias políticas, como la que mantuvo con otro opositor en marzo de 2005 en la Duma.

Como muestra el vídeo que acompaña a esta información, Vladimir Zhirinovski también intentó liarse a bofetadas con el líder opositor Boris Nemtsov durante un debate emitido por la televisión rusa en 1995. El mismo Boris Nemstov fue asesinado en febrero de 2015 en las calles de Moscú, cuando se disponía a encabezar una manifestación contra el Gobierno de Putin.

El nuevo aliado de Carles Puigdemont protagonizó otro escándalo en 2007, cuando fichó como candidato de su partido al espía Andréi Lugovói, considerado como el principal sospechoso del asesinato del ex oficial del KGB Alexander Litvinenko, quien murió en Londres envenenado con polonio radioactivo. El Reino Unido reclamaba la extradición de Lugovói, pero su entrada en la Duma como diputado del PDLR le permitió burlar ese requerimiento, lo que provocó una crisis diplomática entre ambos países.

Vladimir Zhirinovski publicó en 2006 un panfleto antisemita titulado Iván, oculta tu alma, en el que sostiene que los judíos «son pequeños y delgados. Todos malos. Calvos. Con gafas. Con mirada huidiza. Con manos temblorosas. Tienen un montón de enfermedades». En la misma obra, menciona que los judíos «controlan casi todos los periódicos del mundo», «son la nación que más se degrada» y han acumulado «odio a distintos Estados y deseo de vengarse».

Otra marioneta en manos de Putin

Con estas ideas paranoides, Zhirinovski ha intentado convertirse cuatro veces en presidente de Rusia. En las elecciones legislativas de 2016 obtuvo el 13,3% de los votos. Aunque encabeza el tercer partido de la Duma, Vladimir Putin le otorga un trato preferente como líder de la oposición. En realidad, su partido, el PDLR, nunca ha votado en contra de las decisiones del Gobierno de Putin.

Algo que alimenta las sospechas de que Zhirinovski no es más que un títere del presidente ruso, quien ahora le utiliza para apoyar el proyecto independentista de Carles Puigdemont con el fin de desestabilizar a la Unión Europea.

En la manifestación convocada por su partido el pasado día 9 en Moscú, Zhirinovski declaró: «Occidente destruyó la URSS y nosotros queremos destruir Europa, nos conviene. Cuando Cataluña sea independiente iremos a descansar a sus playas. He estado en Barcelona y es una bonita ciudad, con buenas playas».

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