Las víctimas del terrorismo toman la voz en la convención del PP: «No nos olviden»

Las víctimas del terrorismo han tomado este martes la palabra en la segunda jornada de la Convención Nacional de PP para pedir su protección frente al olvido. Lo han hecho la presidenta de la Fundación Miguel Ángel Blanco, Marimar Blanco, el presidente de Dignidad y Justicia, Daniel Portero, la presidenta de la Fundación Jiménez Becerril, Teresa Jiménez Becerril, y el cineasta Iñaki Arteta en la Mesa Terrorismo y Violencia Política que se ha celebrado en Valladolid.

La primera en tomar la palabra ha sido Marimar Blanco, quien también fue diputada ‘popular’ en el Congreso hasta 2019, quien ha afirmado que la formación que lidera Pablo Casado «ha sabido siempre recoger el sentido y las reivindicaciones de las víctimas porque, por desgracia, conoce muy bien lo que es el terrorismo».

Blanco, hermana del concejal secuestrado y asesinado por ETA en 1997 Miguel Ángel Blanco, ha recordado que a día de hoy existen 300 crímenes de la banda terrorista que aún están sin resolver y ha pedido que estos no salgan impunes.

Además, ha afirmado que para la derrota «social y política» de ETA aún queda «mucho camino por recorrer», al tiempo que ha lamentado que el Gobierno de España, encabezado por el socialista Pedro Sánchez, está «traicionando a las víctimas» porque prefiere «dejar al lado su dignidad para sentarse a negociar con quien tanto daño les ha causado».

Por su parte, Daniel Portero ha lamentado que los etarras nunca se han sentido terroristas sino «héroes» y que, por eso, «son recibidos a día de hoy como héroes», en referencia a las decenas de ‘ongi etorri’ que se celebran en el País Vasco para dar la bienvenida a los asesinos que salen de la cárcel.

Portero ha recordado que Dignidad y Justicia estuvo dos semanas tratando de impedir tanto en los tribunales de justicia como en las instituciones que se produjera el homenaje al etarra Henri Parot, condenado por perpetrar 39 asesinatos, que iba a celebrarse en Mondagrón.

Un homenaje que finalmente se camufló como concentración en favor de los derechos humanos y frente al que las víctimas del terrorismo se manifestaron teniendo que soportar los insultos de vecinos del municipio guipuzcoano. Portero, que estuvo allí, ha opinado que esa manifestación de las víctimas fue fruto de su «hartazgo» y que ponía de manifiesto un nuevo «despertar de la sociedad civil». «Era necesario estar ahí», ha aseverado.

Tras el presidente de Dignidad y Justicia ha tomado la palabra Jiménez Becerril quien, en primer lugar, ha agradecido a Casado haber estado «siempre al lado de las víctimas de ETA».

«Tú tienes muy claro que a quien hay que dar visibilidad es a las víctimas no como este Gobierno que se la da a los herederos de ETA, eso es una vergüenza», ha manifestado.

La diputada ‘popular’ ha puesto el acento en su alocución en la importancia de impedir la humillación a las víctimas y el enaltecimiento del terrorismo algo que, ha asegurado, no se protege porque un amplío sector de la Justicia así como el Gobierno de Sánchez se amparan en que «ETA ya no mata».

En este sentido, ha expuesto que «la gente tiene que saber que el PSOE vota en contra de que se deje de humillar a las víctimas del terrorismo». «El otro día voto en contra en el Congreso y yo dije ‘vergüenza’ y Adriana Lastra me dijo ‘la tuya’», ha señalado.

Mientras tanto, Iñaki Arteta, autor de numerosos documentales y películas que relatan el horror del terrorismo en el País Vasco, ha afirmado que «los homenajes son una nueva indecencia y una nueva provocación del mundo ultranacionalista con la permisividad del nacionalismo».