Entrevista a la autora del libro ‘Manual para defenderte de una feminazi'

Seguí: «El feminismo es lo contrario a la excelencia, es la mediocridad más absoluta»

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Carlos Cuesta

Cristina Seguí no duda en asegurar que «el feminismo no es otra cosa que el fascismo pero con un traje más o menos atractivo”. La escritora y colaboradora de OK Diario acaba de presentar su libro ‘Manual para defenderte de una feminazi: y otros asuntos de alta necesidad’. Y ya ha conseguido que sus actos de lanzamiento se vean rodeados de tal cúmulo de presiones, que grandes cadenas hoteleras han preferido dar un paso atrás y no figurar entre las sedes de presentación del libro. Para Seguí el nuevo “comunismo importado de Latinoamérica atropella derechos, no sólo de los hombres, sino también de las mujeres no socialistas”.

Carlos Cuesta.-  Cristina Seguí bienvenida. Muchas gracias por estar con nosotros en la presentación, muy polémica, por cierto, de tu ‘Manual para defenderte de una feminazi’. En España se puede presentar un partido separatista, un partido golpista, un partido cuyo líder ha sido condenado por sedición y por malversación. Pueden sentirse orgulloso un terrorista condenado en grado de dirigente de una banda terrorista y asesina de casi novecientas personas. Pero no puedes presentar sin presiones un libro que habla de feminazis. ¿Qué es lo que está pasando?

Cristina Seguí.- A juzgar por las acciones de boicot y por las acciones totalitarias más propias de un régimen chavista, está claro que me he quedado corta con lo de ‘para defenderte de una feminazi’, que yo no estoy sabiendo defender muy bien. Hablamos, básicamente, de dos partidos políticos: de Podemos y de Izquierda Unida, el Partido Comunista del señor Cubero, que han llevado, junto con el ex alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, a una terrorista del GRAPO que asesinó a seis personas y le han cedido espacios públicos para su propaganda y para las presentaciones de sus libros y de su historia. Al propio Rodrigo Lanza… Pero yo no puedo.

CC.- ¿Eso es libertad de expresión?

CS.- Para ellos sí. Ahora, lo mío debe ser, pues, delito de odio.
Carlos Cuesta: En el resumen de tu libro hablas, en la primera exposición, de que el feminismo actual no es sólo un arma totalitaria de chantaje y coacción a la población masculina, sino también una de las mayores amenazas para la mujer del siglo XXI. Y hablas de feministas de partido político, feministas que financian sus arcas con el dinero de las víctimas.

CC.- ¿Qué es lo que les pone nerviosos de esta exposición?, ¿de cuánto dinero estamos hablando?

CS.- Estamos hablando, básicamente, de que los presupuestos reflejados en el BOJA de Andalucía, recogían 42,8 millones de euros de los que solamente 1,3 iban a las víctimas. El resto se repartía en gastos estructurales, en clientelismo y entre las 2.200 asociaciones que hay solamente Andalucía y vinculadas a la Junta de Andalucía, y que fueron utilizadas políticamente para agredir y rodear en la investidura o la proclamación de los diputados del PP, Vox y de Ciudadanos cuando se cambió el régimen socialista en 2018.

CC.- ¿Los datos de dinero del presupuesto que acabas de dar son datos objetivos?

CS.- Están reflejados en un presupuesto y están perfectamente recogidos.

CC.- Si lo decimos, ¿caemos en delito de odio?

CS.- Bueno, eso será cosa de ellos. El caso es que nosotros, como periodistas, como analistas y como personas que estamos trabajando, tenemos los datos y no tenemos ningún problema. Ahora, sí, hoy en día yo creo que hay que tener miedo, desde luego. Y en vista de lo que me está ocurriendo, no es que yo tenga miedo, pero nunca había vivido una situación como esta.

CC.- Tú estás teniendo problemas para presentar el libro en hoteles, en cadenas de renombre, en empresas muy potentes. Una empresa de estas, cuando tiene miedo de algo, ¿es un miedo exagerado subjetivamente, o es que de verdad hay un determinado poder que puede provocarles daño?

CS.- El comunismo, y la dictadura que se está queriendo importar de toda Latinoamérica, necesita un vehículo amable para atropellar las libertades y para acabar, no solamente con la mitad de la población, que es la población masculina, para atropellar sus derechos, sino para acabar con la competidora, con la mujer no socialista, con la mujer divergente de este tipo de ideologías. Es un elemento perfecto además para extorsionar a los empresarios de la propiedad privada. Fíjate que ellas siempre dicen que los empresarios oprimen a las trabajadoras, pero la realidad es que la mitad de los autónomos de este país son mujeres. Nunca se habla de que estas mujeres puedan oprimir a otras mujeres. Desde luego, eso ya no se sostiene por por ningún lado. Sabemos perfectamente, por pruebas también de la propia coordinadora del 8M de todos los años, que mujeres que trabajan como policías, como guardias civiles, como funcionarios de prisiones, tenían prohibido acudir a esa manifestación por trabajar con el sistema patriarcal y con el capitalismo, por colaborar con el racismo y con todo este tipo de falacias. Lo preocupante es qué tipo de mujeres auspician esta corriente. Es decir, olvídate de que en el feminismo se puede alcanzar la excelencia, el feminismo es lo contrario a la excelencia, es la mediocridad más absoluta. Y este tipo de mujeres son básicamente mujeres inseguras que odian que les recuerdes que son mujeres de cuota, pero son mujeres de cuota y además defienden la cuota y son básicamente mujeres que, eso ya es una teoría mía que defiendo en el libro con una psiquiatra especializada en estos temas, que defienden a criminales, defienden a delincuentes y defienden a terroristas en los platós de televisión. Esto se llama hibristofilia. Y es una enfermedad reconocida por la OMS, no como el machismo, que no es una enfermedad reconocida por nada, es una cosa que se han sacado de la chistera.

CC.- Vamos a hacer un pequeño test de frases, a ver si esto se puede decir o no se puede decir actualmente. A ver si hay que tener miedo por si te incluyen en delito de odio. Por ejemplo, si un determinado político dice: ’Que una política estaba ahí exclusivamente por ser esposa de, que se ha beneficiado del nombre de su marido, exclusivamente porque su marido había decidido ponerla en el cargo’. Si decimos eso de Irene Montero, nosotros podemos tener problemas, por machismo. Pero si lo dice Pablo Iglesias de Ana Botella, ¿entonces no?

CS.- Bueno, esto básicamente es porque ellos saben perfectamente que la gran mayoría de los medios de comunicación de este país tienen una tendencia ideológica muy concreta, que además no se basa en informar, sino en hacer apología y en hacer pedagogía de la doble vara de medir y, por supuesto, de legitimar moralmente la supremacía moral de la izquierda. Tú estás hablando de Irene Montero, pero yo me estoy acordando de la actual mujer del ministro Ábalos, una policía local en excedencia que ahora mismo está trabajando para el delegado de Gobierno, con un sueldo muy generoso. Estoy refiriéndome a la propia Begoña Gómez.

CC.- Begoña Gómez ha conseguido sin tener un título oficial de licenciado, ni de grado, ni de nada, tener un curriculum, incluido académico, enseñando en másters en una universidad pública. ¿Cómo se consigue?

CS.- Si su marido se inventa tesis, ¿cómo no lo va a hacer su mujer? Eso es la igualdad socialista. Ahora bien, es que esta señora está trabajando en el Instituto de Empresa, que recibe dinero público también por parte del Gobierno de España.

CC.- ¿Si hablamos de los datos sobre inmigración entramos en delito de odio o no? ¿Si nosotros decimos que la ley de violencia de género, con las medidas que ha puesto en marcha, prácticamente no ha conseguido reducir el número de asesinatos a mujeres o el número de de víctimas que hay en estos momentos? Si decimos eso, ¿también entramos en delito? ¿por cuestionar una política, no la defensa de la mujer, sino un tipo de política?

CS.- Por fortuna, a algunos de nosotros nos da igual arriesgarnos a eso. La actual Ley Integral contra la Violencia de Género está destinada, fundamentada y perfectamente diseñada para malversar el dinero público de las auténticas víctimas de la violencia. Las asociaciones las dirigen principalmente, dentro del entramado clientelar del PSOE, Izquierda Unida y de Podemos, y lo hemos visto con Infancia libre. Y esto es un hecho. Y, sobre todo, aquí hay un problema, y es que cuando para ti todos los asesinatos de mujeres o todo el maltrato de mujeres tiene una única causa, y además es una causa ideológica, el machismo, eso está costando vidas. Porque tú no estás atendiendo a las leyes policiales, ni a las leyes forenses de este país. Todo el dinero que debería ir volcado a la Policía para que tuviera medios y a la Judicatura, va destinado a las ‘chochocharlas’ y este tipo de de ‘sujetas’. Yo, durante la recepción del libro, pude hablar con policías, con zetas o con comisarios de determinados pueblos que decían que solamente tienen uno o dos zetas para atender a toda la población. ¿Cómo se puede hacer eso?

CC.- Hubo un caso que me llamó mucho la atención, que sacamos aquí, lo de Infancia Libre, una asociación totalmente ligada por contrato profesional a Podemos. Podemos la había metido en el hemiciclo, en la Asamblea de Madrid, la había metido el Congreso de los Diputados, tenían un acuerdo firmado en Granada. Es decir, la relación era obvia y evidente, se habían fotografiado con ellas, y era una asociación en la cual se habían estado practicando, por la cúpula, secuestros de niños para alejarles durante cinco años, seis años, siete años… desescolarizando a los niños con tal de que no volvieran a ver a los padres. Pero en el 90-95% de los medios de comunicación se extirpó la información de su relación con Podemos. ¿Por qué ocurre esto?

CS.- Porque se cae el entramado clientelar, se cae su supremacía moral, se cae la capacidad de una facción política de izquierdas de poder extorsionar a toda la sociedad, como estamos viendo, y porque es muy potente para que cierto número de votantes siga secuestrado. Es decir, ahora estamos hablando de hombres que durante años no han visto a sus hijos pero, ¿de qué manera se los va a reparar? Es decir, esos fondos deberían destinarse a evitar las auténticas causas y a reparar a estos hombres que se han gastado verdaderas fortunas. El otro día yo hablé con uno, la semana pasada, que se ha gastado 40.000 euros en abogados y ha conseguido recuperar a su hijo, verlo dos días a la semana. A esos hombres hay que repararles y el Estado debería repararles. ¿Hay víctimas de primera y víctimas de segunda? pues con esta ley está claro que sí, porque si la ley es tan fantástica, es tan buena para las mujeres, entonces habría que extenderla al resto de la población.

CC.- Te hago una última pregunta. ‘Manual para defenderte de una feminazi’. ¿Quién se va a tener que defender más de los progres? Digo, después de hacerte esta entrevista.

CS.- Probablemente a ti, pero como nos conocemos y hay cierta amistad, tú lo vas a llevar bien, estoy segura.

CC.- No lo dudes. ‘Manual para defenderte de una feminazi: y otros asuntos de alta necesidad’, ¿cuáles son los asuntos de alta necesidad?

CS.- Esa frase la añadió la editorial para diluir un poquito…

CC.- ¿Para anunciar próximas entregar?

CS.- Pero mi título es ‘Manual para defenderte de una feminazi’. Que es para mujeres y para hombres, hay que repetir que esta ideología va destinada a cargarse a la mujer competidora, la mujer competente…

CC.- Pues si no te ‘empuran’ por delito de odio con este libro, supongo que en el de ‘otros asuntos’ sí que lo harán.

CS.- Dales tiempo.

CC.- Cristina Seguí, muchísimas gracias por la entrevista.

CS.- Muchísimas gracias Carlos.

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