El ex subdelegado del Gobierno de Valencia se corrompió en una comida con el jefe de finanzas del PSOE

La libreta incautada por la Unidad Central Operativa (UCO) al empresario presuntamente corruptor del caso Azud, Jaime María Febrer -que ha terminado con la mano derecha de Rita Barberá, Alfonso Grau y el ex subdelegado del Gobierno Rafael Rubio en prisión- ha supuesto ‘oro puro’ para los investigadores. De hecho, tal y como han explicado a OKDIARIO fuentes de toda solvencia, en la misma aparece anotado cómo, cuándo, dónde y quiénes estuvieron en la reunión en la que supuestamente se corrompió a Rubio. Reunión en la que aparece el ex jefe de las finanzas del PSOE, José Cataluña.

Así, el empresario Jaime María Febrer anotó en una libreta que tiene la UCO desde hace meses que, en el año 2005 -y a través del también imputado, socio de una de sus empresas e histórico del socialismo valenciano, José Luis Vera- organizaron una comida a la que asistieron Febrer, Vera, Rubio y el entonces jefe de las finanzas del PSOE valenciano, José Cataluña.

Según la investigación, todo había comenzado unos días antes cuando Rafael Rubio denunció en prensa que una promotora -la empresa de Febrer- obtuvo 763.000 euros al vender un solar municipal por el que había pagado la mitad. Entonces, Rubio acusaba a la alcaldesa Rita Barberá y a su mano derecha Alfonso Grau de «dar un trato de favor a determinadas empresas».

El “cabreo” de Febrer ante las declaraciones del entonces concejal Rafael Rubio fue mayúsculo, según las fuentes. Estaba tan fuera de sí que no dudó en echar mano de José Luis Vera quien, como hacía siempre, según la investigación, le abrió las puertas hasta Rubio. El modo de hacerlo fue un clásico, con un almuerzo.

Fue en ese ágape organizado con un único fin: callar a Rubio, cuando el empresario mostró su disconformidad con las denuncias que éste estaba realizando en los medios. Así, Febrer utilizó una vía clásica para buscar el silencio cómplice: el soborno. Ni más ni menos que 300.000 euros que presuntamente Rafael Rubio se habría embolsado por no levantar más polvo de los chanchullos relacionados con Febrer y Grau.

Esa reunión está perfectamente acreditada porque Jaime María Febrer, al igual que Luis Bárcenas en la Gürtel, anotó con una letra exquisita cada movimiento que realizó entre los años 2005 y 2010, lo que ha supuesto a los investigadores de la UCO una ventana abierta al modus operandi del corruptor.

Inquietud en del PSOE valenciano

La aparición del nombre de José Cataluña en la trama corrupta ha generado inquietud dentro del PSOE valenciano. De hecho, los socialistas están más que preocupados por el hecho de que parte del dinero recibido se pudiera haber utilizado para algo más que hinchar los bolsillos de Rafael Rubio.

¿Qué hacía José Cataluña en esa comida? ¿Por qué no dijo nada en el partido? Ésas son sólo algunas de las preguntas que los actuales dirigentes del PSPV se hacen desde que, el pasado viernes, OKDIARIO publicara que la UCO registró la casa de Cataluña.

‘Operación Azud’

La UCO reventaba este jueves la segunda fase de la operación Azud, una trama de corrupción que tiene como principal imputado al cuñado de la ex alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, José María Corbín. Tal y como adelantó OKDIARIO, a las detenciones del subdelegado del Gobierno Rafael Rubio; de la mano derecha de Barberá, Alfonso Grau; de la hija de éste y del empresario presunto corruptor Jaime María Febrer, se unía el arresto de José Luis Vera, ‘fontanero’ socialista -controla los bajos fondos del partido- y actual jefe de los servicios jurídicos de la empresa pública Divalterra, a quien los investigadores consideran como la persona que unió al empresario corrupto con el PSOE.

De hecho, este sábado, la magistrada instructora del caso decretaba prisión sin fianza para Rubio, Grau y Febrer, así como para otras dos personas, el ingeniero financiero de Febrer, Joaquín P. R. y la empresaria valenciana Mónica M. El resto de detenidos, entre ellos Vera, quedaron en libertad con cargos.

Pero aunque las detenciones más mediáticas se conocían este jueves, el caso Azud saltó a la palestra mediática en abril de 2019 cuando la UCO detuvo a José María Corbín, cuñado de la fallecida alcaldesa Rita Barberá. Según las investigaciones de la UCO, tanto Corbín como otro abogado habrían creado su propia Gürtel para lucrarse personalmente a través del cobro de mordidas en el consistorio que dirigía su cuñada.

Entre los delitos que se le imputan está el hecho de crear facturas falsas que justificaran las mordidas que supuestamente le pagaron varios empresarios contratistas del Ayuntamiento de Valencia entre los años 2006 y 2015. En la primera fase, donde Corbín fue a prisión durante un mes, también fueron imputadas su mujer, Asunción Barberá, y sus tres hijas: María Asunción, María Rita y María José Corbín Barberá.