Puigdemont: «No volví a Cataluña para ser detenido»
Puigdemont ataca al Supremo: "Yo lo llamo un golpe de Estado híbrido"
El ex presidente de la Generalitat y fugado de la justicia Carles Puigdemont ha asegurado este viernes que no volvió a Cataluña «para ser arrestado» sino para «ejercer el derecho a resistir la opresión». «Cuando un juez se niega a aplicar la ley democrática, eso es una forma de opresión que ningún demócrata debería tolerar», ha expresado el líder de Junts en alusión a la negativa del Supremo de aplicarle la Ley de Amnistía que el Gobierno del presidente, Pedro Sánchez, aprobó para eliminar los delitos cometidos por los responsables del procés independentista.
Puigdemont ha descrito los hechos del pasado 8 de agosto como un «acto público» dispuesto por «organizaciones cívicas y partidos políticos catalanes» para «darle la bienvenida» a su regreso. El ex presidente catalán volvió a España tras siete años huido de la justicia, después de ser investigado por organizar con fondos públicos, junto a otros políticos secesionistas, un referéndum de independencia ilegalizado por el Tribunal Constitucional el 1 de octubre de 2017.
El líder de Junts ha señalado a los jueces del Tribunal Supremo por haber decidido «mantener algunas de las órdenes de detención contra quienes organizaron el referéndum independentista del 1 de octubre de 2017» a pesar de la aprobación de la Ley de Amnistía.
El magistrado del Supremo encargado de instruir la causa, Pablo Llarena, dictó un auto en el que no consideraba aplicable la amnistía al político independentista. El juez argumentaba que se malversaron fondos públicos en beneficio personal y afectaron a los intereses económicos de la Unión Europea. Se trata de dos de las excepciones que preveía la medida de gracia para no aplicarla.
Puigdemont ha señalado en un artículo de opinión publicado en el medio Politico que no ha sido «condenado, ni siquiera juzgado». Sin embargo, ha omitido que nada de ello ha ocurrido porque lleva siete años huido de la justicia española, lo que ha impedido que sea juzgado.
I didn’t return to Catalonia to be arrested. I returned to exercise the right to resist oppression. When a judge refuses to apply democratic law, that’s a form of oppression — one that no democrat should tolerate.
«Spanish judges pulled off a hybrid coup» https://t.co/1IRzknlRiy
— krls.eth / Carles Puigdemont (@KRLS) August 16, 2024
El diputado electo en el parlamento de Cataluña ha criticado que la Sala Segunda del Tribunal Supremo está «politizada» porque «ha decidido rebelarse contra una ley que no le gusta, desobedeciendo a un parlamento democrático».
«Golpe de Estado híbrido»
El político prófugo ha descrito la respuesta judicial a la Ley de Amnistía como «un golpe de Estado híbrido» y lo ha argumentado en que los jueces «subvierten la voluntad del pueblo y anulan la legislación aprobada por un gobierno democrático bajo el pretexto del Estado de derecho».
«La distorsión de la realidad que se está produciendo para dejarnos fuera del ámbito de aplicación de la Ley de Amnistía es tan surrealista que no sólo ignora la ley, sino que también se burla de los legisladores españoles», ha manifestado Puigdemont en su artículo de opinión.
A ojos del ex presidente de la Generalitat, tras la petición de la Fiscalía y de la Abogacía del Estado de aplicarle la amnistía, «en circunstancias normales, los magistrados accederían automáticamente a tales peticiones». Sin embargo, al no haberse producido, Puigdemont argumenta que los jueces toman esa decisión por la petición de Vox, «lo que confirma que se trata de una persecución judicial de carácter político», lamenta el líder independentista.