Podemos publica unas cuentas a medias y sin auditar tras denunciar OKDIARIO su opacidad
Podemos ha publicado parte de sus cuentas anuales correspondientes al ejercicio 2019 horas después de que OKDIARIO publicara un artículo revelando que el resto de los cinco grandes partidos de ámbito nacional ya habían difundido esta información en sus respectivos portales de transparencia.
Tras PP, PSOE, Vox y Ciudadanos, que en las últimas semanas e incluso meses ya habían arrojado luz sobre sus balances contables, llega Podemos que, en todo caso, lo hace tarde y mal. La formación morada prometió que iba a ser el único partido que desglosaría a qué destinaba «céntimo a céntimo» su dinero. Sin embargo, ya no aparecen en su Portal de Transparencia sus facturas escaneadas que hasta 2017 difundían trimestralmente. Ya no desglosan así los ingresos y los gastos como hasta entonces. Mediante esos documentos se comprobó que el partido gastaba dinero en bebidas alcohólicas o en pagar las multas de tráfico de sus dirigentes. De hecho, en el apartado de la web de 2019 ya ni aparecen esos epígrafes tras ser eliminados.
El primer partido en difundir su cuenta de resultados fue Vox, que en marzo aprobó su auditoría interna. Posteriormente fueron el PSOE y el PP quienes arrojaron luz sobre su salud económica. Por último, Ciudadanos este miércoles ha facilitado en su página web todos sus documentos contables.
Además, para mayor opacidad, Podemos ha colgado sus cuentas borrando todos los metadatos de los archivos. De esta forma, se asegura que nadie sepa quién es el verdadero autor de los documentos y a qué hora se han elaborado y publicado en la Red.
Datos sin auditar
De todas formas, cabe destacar que se trata de unos números elaborados por el propio partido. Hasta 2017 contrataban una empresa independiente para auditar y fiscalizar sus cuentas. Sin embargo, desde entonces, es la propia formación quien elabora sus balances ya que, según dicen, con el control general que ejerce el Tribunal de Cuentas a todos los partidos de España es suficiente. Por tanto, son datos que podrían ser susceptibles de manipulación.
Ya con todos los datos, se concluye que el PSOE es el partido con más activo no corriente (72.010.159 euros) seguido del PP (63.391.701 euros), Podemos (4.128.837 euros), Vox (1.087.136 euros) y Cs (602.459 euros). En cuanto a activo corriente, los bienes del partido que, por el contrario, permanecen en la entidad menos de un año, los socialistas encabezan el ránking con 59.864.850 euros, seguidos de PP, Vox, Podemos y Cs. Del mismo modo, en relación al pasivo (deudas y obligaciones), el PSOE encabeza el ránking seguidos del PP, Vox, Podemos y Cs.
Nóminas y donaciones
La opacidad se mantiene en relación a las nóminas. Al comienzo de su andadura como partido, Podemos difundía estos documentos PDF de cada uno de sus cargos públicos. Sin embargo, desde 2017 no se informa no se publican, ni tampoco las declaraciones de bienes de sus cuadros. Por ejemplo, Pablo Iglesias e Irene Montero, según la web de Podemos, no tienen aún ningún hijo y no poseen el célebre chalet de Galapagar.
También la falta de transparencia se cierne sobre las presuntas donaciones sociales. En 2017 desarrollaron la tercera edición del Proyecto Impulsa en el que, con transparencia y con criterios públicos, repartían parte de los sueldos públicos. Desde entonces esas supuestas cesiones se hacen sin luz ni taquígrafos. Por su código ético, los cargos públicos de Podemos debían donar la parte de su sueldo que supere los tres salarios mínimos para luego destinarlo a fines sociales. Ahora esa cantidad ha subido aunque la orden se ha dejado de cumplir con el entusiasmo inicial.
Como revelan las nuevas cuentas de Podemos, las «aportaciones de cargos públicos» han pasado de 2.888.049 euros de 2018 a 1.943.560 de 2019. En este sentido, aseguran que destinan 360.102 euros a «proyectos sociales» sin especificar a cuáles y con qué criterios. Únicamente consta a este respecto la declaración judicial del ex abogado del partido, José Manuel Calvente, donde afirma que esas cuantías se ingresaban en una «caja B» y el equipo del diputado Rafa Mayoral lo distribuía a su antojo. Parte de ese dinero habrían ido a parar a #404 Comunicación Popular, una asociación que ejerce labores de productora de televisión para difundir protestas callejeras. Este asunto está siendo objeto de investigación en el Juzgado de Instrucción número 42 de Plaza Castilla.
Un detalle interesante que aparecía en las cuentas de 2018 y esta vez no lo incluyen es que, aunque Podemos demoniza el equilibrio presupuestario en las cuentas del Estado, a sí mismo se aplica esas recetas de austeridad. En su memoria puede leerse que «los principios de responsabilidad y austeridad siguen siendo la base de toda la actuación en materia de finanzas y transparencia».
Por último, los de Iglesias reconocieron en 2018 que no cumplían sus objetivos en materia de transparencia. «Se hace necesario y urgente acometer un análisis de los objetivos de transparencia, los procesos de trabajo que genera y una mayor inversión en desarrollo informático. El compromiso de Podemos es ir más allá de los requisitos legales para marcar un nuevo estándar en la transparencia de partidos políticos», indicaban.