Sánchez concede a Torra una mesa a favor de los presos y el referéndum y «garantías» de cumplimiento

La entrada de Pablo Iglesias en la mesa de negociación con la Generalitat envía un mensaje claro de Pedro Sánchez al presidente inhabilitado de Cataluña, Quim Torra, a favor de la salida de prisión de los presos condenados por el referéndum ilegal del 1 de octubre. Iglesias, como avanzó él mismo, encabezará la delegación del Gobierno junto a Sánchez y otros miembros del Ejecutivo. Entre los candidatos con más opciones figura también Salvador Illa, ministro de Sanidad, y dirigente del PSC de Miquel Iceta. El vicepresidente catalán, Pere Aragonés, uno de los hombres fuertes de ERC y con quien Iglesias tiene una estrecha relación, también ha confirmado su presencia.

La mesa, por tanto, contará previsiblemente con una mayoría sensible a la salida de prisión de los dirigentes secesionistas encarcelados, y también de las tesis a favor de un referéndum. ERC y Junts per Catalunya lo defienden sin ambajes, y también Podemos se ha manifestado a favor de un referéndum pactado. Desde el PSC, Iceta también ha abrazado en numerosas ocasiones las tesis separatistas, afirmando por ejemplo que «si el 65% de los catalanes quiere la independencia» se habría de buscar algún «mecanismo».

Sobre la salida de prisión de los presos del ‘procés’, y mientras el Gobierno avanza en su propuesta para rebajar el delito de sedición en una reforma del Código Penal, la mayoría de los representantes en la mesa se ha manifestado también a favor de los encarcelados. Iglesias, hablando abiertamente de «presos políticos». El propio Iceta llegó a expresar su intención de solicitar indultos para los independentistas en el caso de que resultasen condenados. «Me comprometo, si soy presidente, a tomar todas las decisiones y emprender todas las iniciativas que favorezcan la reconciliación», destacó, con motivo de las elecciones catalanas. Las declaraciones provocaron una honda polémica en su partido.

Una mesa con «garantías»

Aunque tanto Sánchez como Iglesias descartan la controvertida figura del ‘mediador’, el acuerdo suscrito con ERC para la investidura de Pedro Sánchez sí incluye «garantías de cumplimiento» y, para ello, la búsqueda de los «mecanismos» oportunos.

El presidente socialista manifestó tras la reunión con Torra en el Palau de la Generalitat que «el mediador serán los 47 millones de españoles», que serán «testigos» de un diálogo «sincero, franco y transparente». Iglesias, este lunes, aseguró que «no está previsto». «Los dos gobiernos podemos entendernos perfectamente», añadió. Pero se trata de una reivindicación persistente por parte del presidente catalán, inhabilitado por desobediencia. Esa figura del ‘mediador’ fue la que provocó la ruptura de la negociación de los Presupuestos, aunque desde ERC no la consideran ahora indispensable.

La mesa comenzará sus reuniones durante este mismo mes y los contenidos se plantearán sin líneas rojas. «No puede haber ningún tema excluido, cualquier tema es legítimo», aseveró Iglesias.

En el dossier de negociación que Pedro Sánchez entregó a Torra la semana pasada, ‘Agenda para el reencuentro’, el Ejecutivo socialcomunista apuesta por «abrir vías de negociación y diálogo sobre el futuro de Cataluña», a través de la mesa, en la que se buscarán «soluciones políticas que reflejen los intereses de una amplia mayoría de catalanes». 

En ningún momento se alude a la Constitución. La «negociación, el acuerdo y la búsqueda de soluciones», se dice, se harán «en el marco de la ley y el respeto a la seguridad jurídica».

La presencia de Iglesias en la mesa ha sido bien recibida por el separatismo. Gabriel Rufián destacó que el líder de Podemos es un «aliado».

Junts reclama además que en esa mesa de diálogo se escuche la voz de Carles Puigdemont y otros antiguos cargos de la Generalitat fugados.