El patrimonio del líder del Consejo Escolar que no ve acoso en El Palau: 12 casas y 6 locales

El presidente del Consejo Escolar de Cataluña, Lluís Font i Espinós, quien no tardó en salir en defensa de los profesores que acosaron a hijos de guardias civiles en el instituto El Palau de Sant Andreu de la Barça (Barcelona), alterna esta tarea con su escaño por JxCAT en el Parlament, donde declara tener un patrimonio que supera el millón de euros.

Según consta en su declaración de bienes, este parlamentario independentista perteneciente al núcleo duro del expresidente catalán Carles Puigdemont es propietario de 12 viviendas y 6 locales. En concreto, posee al cien por cien un inmueble por valor de 268.500 euros, adquirido a través de una herencia en 2014. También por esta vía el diputado afirma tener el 25% de otras once casas, indicando importes que van desde 2.900 euros hasta 250.000.

Así mismo, Font, que ha criticado un «linchamiento» público en el tratamiento mediático y las redes sociales de los nueve profesores de El Palau denunciados por la Fiscalía de Delitos de Odio, es dueño del 12,5% de seis locales, declarando por ellos cantidades entre 3.400 y 64.000 euros. De igual modo fueron adquiridos por herencia en 2014.

Además, el presidente del Consejo Escolar de Cataluña señala que tiene 9.370,71 euros en una cuenta bancaria, 3.026,99 euros en acciones o bienes análogos y 4.686,38 euros en un plan de pensiones. Por otro lado, apunta que le quedan por pagar 153.299,69 euros de un préstamo hipotecario.

Font percibe actualmente el sueldo de diputado, ya que, según señala en su declaración, el cargo de presidente del Consejo Escolar de Cataluña no está remunerado. Se trata de un puesto político que designa el titular de la Consejería de Educación. En su caso, fue nombrado en 2016 por la exconsellera Meritxell Ruiz, predecesora de la fugada Clara Ponsatí y también vinculada al PDeCat.

Junto a ello, según figura en su declaración de intereses en el Parlamento catalán con fecha del 23 de febrero de 2018, Font también dice desempeñar otra «actividad laboral remunerada» como profesor de la Fundación Blanquerna en la Universidad Ramón Llull.

«Propia idiosincracia»

En un comunicado emitido la pasada semana, el Consejo Escolar de Cataluña manifestó que «en ningún caso los profesores impusieron su opinión ni señalaron a los alumnos hijos de guardias civiles». El órgano que preside Font esgrimió que el instituto público El Palau «ha de estar abierto al entorno, preservando su propia idiosincrasia. Como institución social, ha de educar el espíritu crítico de los alumnos para que, éstos, se conviertan en ciudadanos libres y respetuosos de la alteridad, en una sociedad democrática avanzada», sentenció.

La Fiscalía de Delitos de Odio denunció el pasado día 23 de abril a nueve profesores de este centro por sus comentarios en clase criticando la actuación policial el 1-O, pese a la «humillación» que sabían que podían causar a alumnos hijos de agentes de la Guardia Civil, a los que hicieron que se señalaran frente a sus compañeros de aula. El Juzgado de Instrucción número 7 de Martorell ha archivado la denuncia contra cinco de los nueve profesores y mantiene abierta la investigación sobre los otros cuatro.