Iglesias bloquea la renovación del Poder Judicial: reclama negociarlo con Bildu y ERC y el PP se niega
Pablo Iglesias sigue ampliando su poder y ahora pasa a exigir modificaciones troncales en las negociaciones del Poder Judicial abiertas entre el PP y el PSOE. Podemos exige la presencia de sus aliados, ERC y Bildu, en la negociación de los cambios en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Es más, deja abierta la puerta a que puedan reclamar la designación directa del nombre de algunos de los nuevos vocales. El PP rechaza frontalmente negociar la nueva composición del Poder Judicial con las exigencias de Podemos, Bildu y ERC. El PSOE será ahora quien deba negociar con Pablo Iglesias para poder desbloquear la negociación.
El vicepresidente segundo del Gobierno y secretario general de Podemos tiene claro que ya opera como un solo bloque de la mano de los proetarras de Arnaldo Otegi y los separatistas de Oriol Junqueras. Pablo Iglesias ha exigido la participación de EH Bildu y ERC en la renovación del Poder Judicial.
El mensaje ha sido captado con claridad por los ‘populares’ que han respondido con un único mensaje: “Nuestras condiciones para renovar el CGPJ son las de siempre y no se cambiarán”.
El PSOE lleva tiempo empeñado en lograr el apoyo del PP para la renovación del Poder Judicial, un organismo del que dependen los ascensos y designaciones de las plazas judiciales y que, en estos momentos, cuenta con mayoría conservadora. Y conoce desde el inicio de las conversaciones con los hombres de Pablo Casado las exigencias del PP para cerrar este pacto: que Podemos no intervenga de ninguna de las maneras en la negociación; que se cierre está renovación con compromiso previo de abordar, posteriormente, una reforma completa de la ley para retornar al modelo de elección de la mayoría de los vocales del Poder Judicial por los propios jueces, tal y como exige la Constitución Española; y que la actual elección de vocales se haga con respecto a una preselección de 35 candidatos designados por el colectivo de jueces y no por los partidos políticos.
Pero el empecinamiento en renovar el Poder Judicial no es exclusivo de los socialistas: Pablo Iglesias exigió desde el inicio oficialmente a Pedro Sánchez un cambio urgente de los miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) con el fin de introducir afines a la formación morada y poder interferir, de este modo, en la causa abierta por la ‘caja B’ de Podemos. Y eso implica que Podemos interviene de forma decisiva en la designación del nuevo CGPJ.
El PP no está por la labor de ofrecer apoyo a la renovación del Poder Judicial en estos términos, tal y como ha publicado OKDIARIO. Y ahora menos, con la exigencia de introducir en las variables las peticiones y deseos de Bildu y ERC. Y no debe olvidarse que los hombres de Pablo Casado disfrutan de una mayoría de bloqueo que puede impedir la entrada de nuevos vocales en el CGPJ.
Nervios en Podemos
Podemos, pese a ello, ha elevado la apuesta ante el nerviosismo reinante en sus filas por el avance del caso que apunta a una ‘contabilidad B’ dentro del partido, tal y como ha denunciado ya el ex responsable jurídico de la formación morada, José Manuel Calvente.
Por todo ello, el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que haga todo lo posible por intentar convencer a los ‘populares’ como sea, con el único fin de intentar controlar y manipular ese proceso judicial en el que el propio partido morado se encuentra ya imputado. Y ahora lo hace inyectando en la negociación el peso en el Parlamento de Bildu y ERC, los grandes socios y avales de la política presupuestaria del propio PSOE.
El asunto es vital para Podemos y quiere meter presión en esta negociación de la mano de los proetarras y los separatistas. Tras tomar declaración al abogado José Manuel Calvente –al que Podemos despidió con una falsa acusación de acoso sexual para intentar silenciarle, como ha acreditado la Justicia–, el juez decidió imputar a Podemos como persona jurídica; al responsable de sus campañas electorales, Juanma del Olmo; al tesorero Daniel Frutos y a la gerente del partido, Rocío Val.
Y la respuesta de Podemos fue nítida: A través del panfleto que dirige Dina Bousselham, ex asesora de Pablo Iglesias, Podemos señaló en aquel momento que el juez Escalonilla utiliza métodos propios de la «Alemania nazi» en su investigación sobre la financiación ilegal del partido morado.
Una semana después de que el juez imputara a Podemos por los presuntos delitos de malversación y administración desleal, el panfleto de Dina publicó ese artículo en el que afirmaba, además, que Escalonilla está llevando a cabo una «investigación prospectiva» prohibida por el ordenamiento jurídico español y «vinculada al denominado Derecho Penal de autor, que no persigue hechos o actos delictivos concretos sino personas u organizaciones concretas, que convierte en sospechosas por ser quienes son».
El líder del PP está dispuesto a aceptar una negociación sobre la renovación de los miembros del Poder Judicial y del Tribunal Constitucional, pero nunca bajo esas pretensiones.