Llarena quiere que la UE se pronuncie sobre si Alemania aplica correctamente la OEDE con Puigdemont
El magistrado del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, estudia la posibilidad de plantear una cuestión prejudicial ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea TJUE acerca de la decisión marco relativa a la Orden Europea de Detención y Entrega OEDE y a los procedimientos de entrega entre Estados miembros. Es decir, que la UE se pronuncie sobre la aplicación de la OEDE por Alemania en el caso de Puigdemont.
La cuestión prejudicial es un medio de defensa técnico, mediante el cual se busca suspender el desarrollo de un proceso penal, en donde se ha presentado un supuesto de prejudicialidad, que por razón de su materia, no puede ser resuelto por el juez penal.
En el caso de que Llarena finalmente presente la cuestión prejudicial ante el TJUE, y dicho tribunal la admita, podría ser paralizado temporalmente el proceso de entrega de Puigdemont.
El magistrado toma esta decisión después de que la Audiencia Territorial de Schleswig-Holstein (norte de Alemania) descartara este jueves el delito de rebelión en la petición de extradición a España de Puigdemont y decidía dejarlo en libertad bajo fianza de 75.000 euros mientras se estudia la entrega. La policía alemana detuvo el pasado 25 de marzo al expresidente catalán cuando cruzaba la frontera en coche desde Dinamarca rumbo a Bélgica, país en el que tiene fijada su residencia, en aplicación de la euroorden cursada por la justicia española.
Tal y como publicaba OKDIARIO, el Tribunal Supremo sostiene que la justicia germana “ha desbordado y desenfocado el marco de la euroorden” ya que se tendría que haber limitado a efectuar “un juicio de contraste entre las dos legislaciones, la penal alemana y la española”. La justicia alemana desoyó los argumentos de la Fiscalía de su país y desde el Alto Tribunal se considera que “no tenía que examinar la fundabilidad de la acusación en modo alguno” y por tanto, “se ha extralimitado”.
El delito de rebelión no forma parte de la lista de 32 que están exentos del principio de la doble incriminación y para que se pueda entregar a Puigdemont por este delito es imprescindible que Alemania lo considere punible. Sin embargo, para determinar esta doble incriminación en ambos países, sólo se tienen que evaluar los hechos presentados por el juez Llarena sin tratar de demostrar los presuntos hechos delictivos, ya que esta parte del proceso se reserva para el juicio oral.
Según el criterio del Supremo, la justicia alemana no tendría que haber profundizado a la hora de determinar si existió o no violencia como ha hecho. Esta decisión ha descolocado los planes de la justicia española que tenían como objetivo que Puigdemont fuera juzgado por los delitos por los que fue procesado.
La Fiscalía Alemana solicitaba la extradición del expresidente de la Generalitat de Cataluña por rebelión y malversación, tal como pedía el magistrado del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, al entender por razones evidentes, que existía un elevado riesgo de fuga.