Irene Montero destina 200.000 € de los Presupuestos al grupo de cooperativas ligado a Podemos
En el Grupo Tangente trabajaron la ex concejal Celia Mayer y el ex tesorero de Ganemos Madrid
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El Ministerio de Igualdad, liderado por Irene Montero, ha incluido una jugosa partida de 200.000 euros en los Presupuestos Generales del Estado destinada discrecionalmente al Grupo Cooperativo Tangente, conocido por sus múltiples vínculos con Podemos. Varios miembros de este conglomerado han formado parte de partidos que se han presentado con los morados en coalición a procesos electorales.
Tal como ha podido comprobar OKDIARIO, dentro del programa «Igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres», el equipo de Irene Montero presupuesta 200.000 euros para Grupo Cooperativo Tangente. Ya el año pasado se reservó una partida a esta entidad compuesta por 14 empresas sociales y 130 trabajadores que a la vez son socios. En ese caso fue de 180.000 euros. A pesar de que PSOE y Podemos propugnan una gestión directa de los servicios que se ofrecen a la ciudadanía, en este caso privatizan estos programas de «actividades que fomenten la no discriminación de la mujer y su participación en la sociedad».
Tangente es un viejo conocido de la órbita de Podemos. Se trata de una red de sociedades cooperativas cuyo principal abanderado es Fernando Sabín. Fue tesorero de Ganemos Madrid, uno de los partido que impulsaron la candidatura de Ahora Madrid que permitió a Manuela Carmena ser alcaldesa de la capital. En esa coalición participaron personas de Podemos, IU, Equo, Ganemos e independientes.
También otro vínculo directo de Tangente con Irene Montero es Celia Mayer. La concejal de Manuela Carmena trabajó en esta cooperativa de 2013 a 2015, es decir, hasta que entró en el Palacio de Cibeles como edil. Ahora, ha sido fichada como asesora precisamente en el Ministerio de Igualdad.
Otra de las socias de una de las entidades de la red Tangente fue Nuria Sánchez, que trabajó entre 2005 y 2015 en la entidad. Fue hasta que se integró en la Mesa de Coordinación de Ahora Madrid y formó parte del Gobierno madrileño como asesora de Guillermo Zapata.
Del mismo modo, una ex directora estratégica del grupo, Rosa Domínguez, fue asesora de Zapata, el entonces edil presidente de los distritos de Fuencarral-El Pardo y Villaverde.
Así mismo, otra persona que saltó de una entidad de Tangante a la política de la mano de Ahora Madrid fue Antonio Hernández Toño. Fue coordinador de Ahora Madrid hasta que Carmena lo cesó por su afinidad con los ediles más críticos del grupo municipal.
No obstante, entre todos esos vínculos, destaca el de Fernando Sabín, hombre fuerte de Tangente y posteriormente de Ganemos. Fue uno de los responsables de la comisión económica de Ahora Madrid. Fue igualmente parte del Comité de Dirección del proyecto Mares del Ayuntamiento de Carmena. Este plan gestionó 4,8 millones de euros de la UE y 1,4 millones del Consistorio.
3,1 millones
De esta forma, Irene Montero hace un importante guiño al Grupo Cooperativo Tangente. El dinero sale de las transferencias del Instituto de las Mujeres. El volumen total de dinero para esas transferencias a dedo es el de la nada desdeñable cifra de 3,1 millones de euros.
Ahí figuran 60.000 euros para cooperativas agroalimentarias de España, 50.000 euros para la Asociación Nacional de Mujeres de la Pesca, 125.000 euros para un convenio con la Cruz Roja, otros 125.000 para la Fundación CEPAIM Acción Integral con Migrantes, otros 125.000 para la Fundación
Secretariado Gitano, 250.000 para la Federación Española de Universidades Populares o, entre otros, 125.000 para Médicos del mundo.
Polémica
Tangente saltó a los titulares de la prensa en 2018, tras conocerse subvenciones por más de 800.000 euros del Ayuntamiento de Carmena en dos años. Se destaparon los vínculos de sus socios con el equipo de Gobierno de Ahora Madrid. Cuatro años después siguen maniobrando para conseguir fondos públicos de Administraciones gestionadas por personas del mismo ámbito de militancia.
Por su parte, Tangente aseguró entonces que trabajan con administraciones de todo signo político, destacaron que no tienen ánimo de lucro y que sus beneficios se revierten en las cooperativas y en contratar más personas, y, por último, indicaron que muchos proyectos con el sector público los han conseguido tras licitaciones abiertas.