‘Erre-Judas’, ‘La Bono’ y ‘Lady Ego’: quién es quién en la guerra Podemos-Sumar por sus motes internos

Los cimientos de la izquierda radical española se tambalean. Tras la convulsa campaña electoral de Sumar y Podemos, los resultados del 23J abren un escenario en el que los diferentes actores se recolocan para encarar el nuevo ciclo político de la mejor forma posible. La batalla entre los partidarios de Pablo Iglesias y los de Íñigo Errejón sigue siendo descarnada. En este contexto, los motes y apelativos descalificativos están a la orden del día. Todo para tratar de desprestigiar al enemigo interno y conseguir más poder en el espacio a la izquierda del PSOE. OKDIARIO recopila algunos de esos sobrenombres habituales en las redes sociales y en los círculos de ese espectro político.

Erre-Judas: Las alusiones a la «traición» de Errejón son constantes. Día a día se recogen tuits con ese apodo en referencia a Judas Iscariote, el apóstol que traicionó a Jesucristo a cambio de 30 monedas de plata. El movimiento de crear Más Madrid con Manuela Carmena cuando estaba confirmado como candidato de Podemos a la Asamblea de Madrid sigue escociendo en el seno morado.

Lady Ego, Yoyoyoli, Barbie, Yolipuñales…: La ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda del Gobierno también se ha convertido en objeto de mofas. A pesar de que Pablo Iglesias la designó a dedo como sucesora, los bots ligados a Podemos la renombran por su supuesto aprecio excesivo por su propia persona. También la bautizan como «Yolivetos» para recordar su «puñalada» a Irene Montero.

La Bono: Otra figura que genera un importante rechazo en Podemos es Mónica García. La líder de la oposición al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso era una diputada destacada de Podemos, pero su salto al errejonismo no ha sido perdonado. Para tratar de invalidarla como figura política, recuerdan su polémica con el bono social para pagar facturas térmicas y eléctricas que cobraba a pesar de su cómoda situación económica con un sueldo de 75.000 euros.

Rita Falcó: Del mismo modo, Rita Maestre, que competía contra Podemos en los comicios del 28M, tampoco es santo de la devoción de los militantes más acérrimos de Podemos. Consideran que su punto débil es su forma de expresarse que, sostienen, se parece en el tono de voz a Tamara Falcó, marquesa de Griñón. 

Trepar y Restar: Podemos tampoco cree en Sumar tal como se ha configurado por ahora. Por tanto, usan el apelativo de Trepar o el de Restar indistintamente para minusvalorar ese proyecto que consideran que nace muerto y que ha conseguido en conjunto unos resultados peores a los que logró Podemos en 2019. Creen que el equipo de Yolanda Díaz se ha convertido en «un nido» de trepas que sólo quieren un cargo y que generan una bajada de votantes.

MásPáMí: El partido fugaz que creó Errejón para presentarse a las elecciones generales, Más País, también es objetivo de críticas. Abandonó la Asamblea de Madrid para volver al Congreso en coalición con Equo y Compromís. No gustó nada esta maniobra y de ahí ese sobrenombre.

✊💪😉🤣🤣🤣🤣#YoNoSumo#ConYolandaNo#YoNoVotoSumar#YoNoVotoTraidores

Yo con @gabrielrufian y @OskarMatute ellos si me representan y no Yolanda y Errejudas 🤮 pic.twitter.com/hBTCrjn0oL

— mafalda1 (@mafalda1pao) July 16, 2023

Otros conceptos que han sido renombrados son los fanáticos de Errejón y Díaz. Reciben el mote de «errejoners» y «sumanders». Se trata de personas que aplauden sin hacer ninguna crítica las decisiones de los dos líderes políticos citados. El clima que vive la izquierda es de alta tensión y constantemente se mira de reojo a cualquier militante para saber si es del mismo sector o es afín al bando contrario.