La CUP critica que TV3 oculte su papel en la organización del referéndum ilegal del 1-O
La diputada de la CUP Mireia Boya ha criticado en Twitter que su formación política haya quedado excluida del programa 30 Minuts emitido este domingo en TV3, en el que se relataba cómo se llevó a cabo el engaño para ocultar las urnas del referéndum ilegal del 1-O.
El partido antisistema jugó un papel clave junto a la ANC y Ómnium Cultural (cuyos presidentes han sido imputados en la Audiencia Nacional por un delito de sedición) para organizar los grupos de voluntarios que ocultaron las urnas y protegieron los colegios electorales, con la connivencia de los Mossos d’Esquadra, para que se pudiera celebrar el referéndum ilegal.
Llàstima que @30minuts hagi "oblidat" la @cupnacional a #DiesClauTV3. Hi hem estat, hi som, arreu.
— Mireia Boya Busquet (@yeyaboya) October 8, 2017
El hecho de que el papel de la CUP haya quedado desdibujado en el programa de TV3 ha creado malestar en el partido antisistema, que durante meses ha pilotado el proceso secesionista y ahora se siente desplazado en la estrategia de Carles Puigdemont.
Pero la queja de Mireia Boya es también un síntoma de la tensión que ha surgido entre las formaciones independentistas sobre los nuevos pasos que debe dar la Generalitat. La CUP exige declarar cuanto antes la independencia y habla incluso de empezar a «tomar» infraestructuras clave como los puertos y aeropuertos. Aunque esto pueda traducirse en un estallido de violencia.
Una independencia «a plazos»
Por su parte, como ha informado OKDIARIO, Puigdemont es partidario de una declaración de independencia a plazos. Si sigue adelante su guión, el martes proclamará la independencia de Cataluña en el Parlament, argumentando que se siente legitimado para ello por el resultado del referéndum ilegal.
Pero como la Generalitat carece de medios y reconocimiento internacional para hacer efectiva la independencia, anunciará la convocatoria de elecciones autonómicas (que podrían celebrarse en diciembre o, como mucho, en un plazo de seis meses) para que el nuevo Govern surgido del Parlament sea el encargado de hacer efectiva la independencia.
En este lapso de tiempo, Puigdemont intentará (con la activa colaboración de Podemos y, posiblemente, del líder socialista Pedro Sánchez) que algún organismo internacional acepte implicarse como «mediador» en el conflicto. Conseguiría así el reconocimiento internacional del que hasta ahora carece el proceso.