Artur Mas acusa al estado de «querer destruir el PDeCAT para frenar la independencia»
Primero se saltaron las leyes en su iluminación independentista para acusar después al Gobierno de España de judicializar un problema político. Y después, cuando les pillaron todas las corruptelas, aún presuntas pero con consecuencias —como el embargo judicial de las sedes de la viaje Convergència—, decidieron aplicar la misma lógica de señalar a quien se mantiene dentro de la norma democrática como culpable de querer «destruirlos». El ex presidente de la Generalitat Artur Mas ha acusado este sábado al Estado de intentar «destruir» el PDeCAT «por tierra, mar y aire», porque son conscientes de que sin la antigua Convergència «no habrá Estado» independiente para Cataluña.
En el transcurso de su intervención en el acto de presentación del PDeCAT en Barcelona, acompañado de la presidenta del partido en la ciudad, Mercè Homs, y del portavoz del grupo municipal, Joaquim Forn, Mas ha evitado citar explícitamente las últimas informaciones que apuntan a una presunta financiación irregular de Convergència, pero sí ha denunciado: «Van a por nosotros directamente».
Así, poco importa que sea la Fiscalía Anticorrupción la que considere acreditado que el ex tesorero de CDC Andreu Viloca era la persona responsable de la presunta concesión de obra pública a cambio de comisiones, porque todo es una conspiración política, según Mas. Más allá de que, según publica El Mundo, un empresario ha declarado en secreto ante el juez que instruye el caso 3 % que el propio ex presidente de la comunidad autónoma catalana le dio instrucciones sobre pagos irregulares a CDC en una reunión junto al ex conseller de Justicia Germà Gordó.
Mas ha declinado hacer declaraciones sobre esta información, pero en su intervención en el Centro Artesano Tradicionàrius, ante cerca de 500 afiliados, sí ha hecho una velada alusión a las motivaciones que hay detrás de ello.
Cuando se inició el proceso hacia la independencia, ha señalado, CDC empezó a «estorbar de veras» al Estado, porque «saben» que «sin el PDeCAT no habrá Estado en Cataluña».
Por eso «intentarán debilitar o, si pueden, destruir por tierra, mar y aire» lo que representa el PDeCAT, ha protestado Mas, que ha hecho referencia al juicio por la consulta soberanista del 9N de 2014, por el que puede ser inhabilitado, al igual que el portavoz de los demócratas en el Congreso, Francesc Homs, que acudirá el lunes al Tribunal Supremo.
«Otros van a juicios por casos de corrupción, nosotros vamos porque pusimos las urnas. Hicimos simplemente de demócratas», ha denunciado.
Después de que el fiscal haya presentado esta semana una querella contra la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y los otros tres miembros de Junts pel Sí en la Mesa de la cámara catalana, Mas ha recurrido a la ironía para cuestionar su imparcialidad: «La Fiscalía es muy independiente, no recibe órdenes de nadie».
En un mensaje a la dirección ejecutiva del partido, capitaneada por Marta Pascal y David Bonvehí, presentes en el acto, ha advertido de que «este intento de debilitar, o incluso destruir, lo que nosotros representamos continuará».
«Id con mucho cuidado, no les deis ninguna excusa, porque la convertirán en una prueba, y la prueba la convertirán en un delito, porque también irán a por vosotros», ha dicho Mas.
Asimismo, ha lanzado una advertencia a los «poderes del Estado», por si tienen la tentación de intervenir la autonomía catalana invocando el artículo 155 de la Constitución: «Que vayan con cuidado con según qué hagan. La sociedad catalana es muy pacífica, aguanta mucho y tiene paciencia, pero en su ADN hay la voluntad y el anhelo de gobernarnos a nosotros mismos».
«Según qué se planteen con la autonomía catalana, se encontrarán con la reacción de la sociedad catalana, cívica y pacífica pero contundente. Que lo calculen bien», ha recomendado Mas, que ha asegurado que los catalanes han «perdido el miedo».