La CUP avisa de que el acuerdo con JxCAT y ERC para la investidura «está muy lejos»

El diputado de la CUP Carles Riera ha advertido este martes en rueda de prensa de que el acuerdo con JxCat y ERC para apoyar a un candidato a la Presidencia de la Generalitat «está lejos o muy lejos».

«Estamos muy lejos de un posible acuerdo», y ha añadido que ambos grupos les han trasladado que el acuerdo tiene tres ejes: una acción institucional republicana en el exilio presidida por Carles Puigdemont; una acción institucional en Cataluña con el Parlament y el Govern, y la movilización ciudadana a través de un Proceso Constituyente.

La CUP rechazará todo lo que tenga que ver con que el desarrollo de la república se circunscriba a la gestión desde Bélgica mientras las instituciones en Cataluña trabajan en una dinámica autonomista: «No aceptaremos nada que suponga un acatamiento del 155. El no acatamiento tiene que venir también desde el Parlament».

Uno de los puntos en que «de momento no hay acuerdo» es sobre el Proceso Constituyente, que los ‘cupaires’ quieren llevar a cabo independientemente del papel que tenga la institución en Bélgica dirigida por Puigdemont.

Riera ha avisado que el Proceso Constituyente se debe hacer «desde Cataluña» porque es el momento en que la ciudadanía participa del debate del futuro de Cataluña.

«Tiene que ser un proceso de empoderamiento popular y vinculante, que se lleve a cabo dentro de esta legislatura y que culmine con nuestra propuesta de multirreferéndum que debe ratificar los principales contenidos», antes de dar el siguiente paso, el de una Asamblea Constituyente.

Precisamente la Asamblea Constituyente fue uno de los puntos que acordaron con JxCat y ERC para investir a Puigdemont en el pleno del 30 de enero –antes de que el presidente del Parlament lo pospusiera–, y es un acuerdo que vuelve a estar sobre la mesa, aunque Riera avisa de que ahora serán «más exigentes».

Legitimar a Puigdemont

La CUP ha explicado que la propuesta de resolución que JxCat llevará al pleno del jueves para legitimar la figura de Puigdemont también está «lejos de los planteamientos de la CUP, y se focaliza en la restitución de la autonomía», por lo que han presentado enmiendas.

«No hemos venido al Parlament a restituir la autonomía, sino a retomar la tarea que quedó interrumpida»: materializar la república, por lo que las enmiendas de la CUP irán más allá de legitimar a Puigdemont y proclamarán la legitimidad del 1-O y de la declaración de independencia del 27-O.

El peso del voto de la CUP

La investidura de un presidente requiere, en primera vuelta, una mayoría absoluta de 68 diputados; y en segunda vuelta sólo requiere mayoría simple –más votos a favor que en contra–.

JxCat y ERC tienen 66 diputados pero 4 no tienen asegurado el voto –Oriol Junqueras y Jordi Sànchez están en prisión y Carles Puigdemont y Toni Comín en Bélgica–, por lo que necesitan los 4 votos afirmativos de la CUP para asegurar que superan los 65 votos de la oposición.

Los ‘cupaires’ abandonaron las reuniones de negociación y supeditaron su vuelta a que JxCat y ERC encarrilaran un acuerdo; volvieron a los encuentros el viernes, celebraron otro el lunes, uno más este martes por la mañana, y prevén reunirse este martes por la tarde.

En esos encuentros se les ha trasladado el acuerdo genérico pero no la estructura de consellerías, la distribución de carteras ni el nombre del candidato, aunque sí les han transmitido que faltan flecos por cerrar, por lo que Riera ha avisado: «Hemos esperado más de un mes, casi dos, para un acuerdo, y no se puede pretender que en una semana la CUP firme ese acuerdo».

«Cualquier fruto del diálogo que tengamos con JxCat y ERC tendrá que ser trasladado al Consell Polític que la CUP» de este sábado, ha añadido.