Rivera se aleja de la socialdemocracia: «El centro no es socialista»
Ciudadanos fija este fin de semana en Coslada (Madrid) su hoja de ruta para los próximos años.
Una necesaria redefinición para un partido que ha pasado de ser formación autonómica, a cuarta nacional, y de tener tres diputados autonómicos a 93, y 32 en el Congreso.
A priori, el cónclave no depara sorpresas, toda vez que el equipo de Rivera controla más del 65 por ciento de los compromisarios, lo que le asegura resolver los debates sin previsibles contratiempos.
No obstante, la discusión sobre la definición ideológica no es menor y deja entrever el diluido espacio político en el que siempre se ha movido el partido. Así, el nuevo ideario propuesto por la Ejecutiva prescinde de la etiqueta de socialdemócratas, algo que ha creado malestar en un sector de los militantes, la mayoría procedentes de Cataluña. Según el nuevo redactado, Ciudadanos quedará así definido como «un partido constitucionalista, liberal-progresista, demócrata».
En puertas del debate, Rivera ha lanzado una advertencia a quienes, dentro del cónclave, defenderán el ideario original, de 2007 y firmado por Francesc de Carreras. El líder de Ciudadanos, que se implicará de forma especial en la defensa de esa ponencia, junto al portavoz parlamentario Juan Carlos Girauta, ha advertido de que «hay gente que quiere que el partido no se defina como progresista y hay gente que quiere que seamos socialistas, como el PSOE. El centro político no es socialista ni conservador, es de centro y liberal-progresista».
La enmienda ha sido presentada por la candidatura ‘Mejor unidos’, que encabezan el exdiputado Jordi Cañas y el diputado catalán Sergio Sanz. Por su parte existe una voluntad de acuerdo, pero poca flexibilidad a que se prescinda de una definición que consideran necesaria. Desde la dirección se cree que la etiqueta de socialdemócratas «está ya superada» y no se ajusta a los nuevos tiempos del partido.
La portavoz en el Ayuntamiento, Begoña Villacís, reiteró la importancia de «debatir» las enmiendas y «aceptar el documento que salga» en tanto «gesto democrático». Su homólogo en la Asamblea, Ignacio Aguado, aseguró que el partido es «liberal» y «lo que hay que hacer es seguir conquistando derechos desde el progresismo».
Entrada en gobiernos
Otra de las discusiones calientes era la que planteaba si Ciudadanos debe o no entrar en los Gobiernos que sostiene. La postura de la Ejecutiva es ciertamente ambigua: mientras en el ámbito municipal esa entrada se fija en las próximas elecciones, en el caso autonómico y nacional no existe fecha marcada. De hecho, en las últimas negociaciones de investidura, Rivera no descartó entrar en el Ejecutivo si éste no estaba presidido por Mariano Rajoy. Una de las enmiendas, desestimada, pedía que esa entrada fuese inmediata para reforzar al partido como «una alternativa creíble y atractiva de gobierno».