Starbucks anuncia la salida de su consejero delegado, Kevin Johnson
La firma estadounidense Starbucks ha anunciado este miércoles la salida de su consejero delegado, Kevin Johnson, y el regreso al puesto de manera temporal de Howard Schultz, considerado el artífice de la expansión mundial de la cadena de cafeterías.
«Hace un año indiqué al consejo que con la llegada del fin de la pandemia me plantearía retirarme de Starbucks. Siento que este es el fin lógico a mis 13 años con la compañía», explica en el texto Johnson, que fue nombrado consejero delegado de la empresa en abril de 2017.
Por otro lado, el directivo asegura que «mientras llevo a cabo la transición, tenemos mucha suerte de tener un fundador que es capaz de intervenir de forma interina, lo que da tiempo al consejo a explorar candidatos en potencia y tomar la decisión de la sucesión correcta a largo plazo para la empresa».
Durante sus cerca de cinco años como consejero delegado, Johnson utilizó su experiencia como ejecutivo en el sector tecnológico para sumergir a Starbucks en la era digital, rediseñando por ejemplo su programa de fidelidad, a la vez que impulsó la expansión de la cadena en China, que se ha convertido en su segundo mercado más grande, según informa Efe.
Nuevo consejero delegado
Starbucks afirma que tiene la intención de elegir al nuevo consejero delegado permanente para este otoño, a la vez que Schultz, que ya ocupó ese puesto desde 1986 hasta 2000 y desde 2008 hasta 2017, subrayó que no vuelve a la empresa para quedarse. «Cuando amas algo, tienes un profundo sentido de responsabilidad cuando se te pide ayuda. Aunque no planeaba volver a Starbucks, sé que la compañía debe transformarse una vez más para enfrentarse a un futuro emocionante», apuntó Schultz, que según el anuncio de la compañía recibirá un sueldo de un dólar como consejero delegado.
El cambio en el máximo puesto de dirección de Starbucks se produce en un momento en el que los empleados de seis de sus establecimientos en EE.UU. han decidido sindicarse, y alrededor de 140 tiendas más en 26 estados diferentes han presentado solicitudes para lo propio.
Starbucks ha mostrado abiertamente su oposición a la formación de sindicatos, y ha asegurado que los «costos laborales podrían aumentar» y que el negocio «podría verse afectado negativamente».