¿Por qué la marca española Lesac ha ganado a Armani en los tribunales?
Lesac ha ganado a Giogio Armani ante la justicia europea tras seis años de disputas. El Tribunal General de la Unión Europea (TUE) ha dado la razón a la firma española frente al gigante italiano en un conflicto de marca. El problema nació en diciembre de 2014, cuando Armani solicitó ante la EUIPO (Oficina de Propiedad Intelectual de la UE) el registro como marca para bolsos, artículos de marroquinería, viaje y otras prendas de vestir de las palabras «Le Sac».
Cuatro meses después, el empresario madrileño dueño de Lesac se opuso al registro, alegando el riesgo de confusión con varias marcas que ya existían previamente y que -además- se dirigían a los mismo productos: la marca denominativa Lesac y dos marcas figurativas idénticas destinadas a la venta de ropa, calzado, sombrerería y venta al por mayor. La empresa española llegó antes.
«Hay una similitud tanto en la denominación como en la aplicación -el producto para el cual se pide la marca-, lo que podría generar confusión entre los consumidores», dice José Carlos Erdozain, of counsel de Pons IP. El experto añade que se trata de un “supuesto en el que la existencia de una marca anterior puede entorpecer, cuando no impedir, la concesión de una solicitud de marca que coincida con aquella”.
Tras la reclamación de Lesac, Giorgio Armani recurrió ante la Oficina de Propiedad Intelectual de la UE y luego ante el Tribunal General de la Unión Europea alegando que la confusión no debería existir ya que su nuevo objetivo pasaba por comercializar la marca «Le Sac» acompañada del nombre Armani. El argumento de los italianos tampoco convenció al Tribunal con sede en Luxemburgo que concluye que el riesgo de confusión entre las marcas es real.
«Poco importa en este caso que se pretenda esquivar el riesgo de confusión incluyendo en la marca solicitada otro signo que sí tenga renombre, puesto que siempre queda el riesgo de asociación, que es una forma de riesgo de confusión», dice el experto de Pons IP.
Los plazos
Aunque cada reclamación que se abre en la Oficina de Propiedad Intelectual de la UE tiene sus propios plazos, la tramitación del caso de Lesac y Armani-seis años en total- se ajusta a los tiempos medios de tramitación.
Según explica el experto de PONS IP, firma especializada en propiedad industrial e intelectual, «hay una primera fase administrativa en la EUIPO que puede durar fácilmente dos o tres año de media. Luego, una vez que concluye este periodo administrativo y si alguna de las partes impugna la decisión ante el Tribunal General de la Unión Europea, ese proceso puede tardar entre un año y medio o más».
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