La inminente recesión provoca que algunos inversores rebajen sus previsiones de subidas de tipos del BCE
El BCE repite una subida de 0,75 puntos de los tipos de interés y los lleva al 2%, máximos desde 2009
El mercado cree que el BCE elevará los tipos a un máximo del 3,5% con una reducción del balance en 2023
España al borde de la recesión: la economía se frena en seco hasta el 0,2% en el tercer trimestre
España entra de lleno en un proceso de estanflación que aboca a un fuerte aumento del paro
El Banco Central Europeo (BCE) cumplió con lo previsto y subió los tipos de interés en 0,75 puntos, hasta llevar el principal al 2%, máximos desde 2009. Los expertos daban por hecho que el 15 de diciembre se anunciaría otra subida de la misma envergadura, pero las últimas cifras macroeconómicas unidas a las palabras de la presidenta del organismo, Christine Lagarde, han provocado que las opciones de un incremento de 0,5 puntos ganen enteros en las últimas horas.
España ya está al borde de la recesión después de cerrar el tercer trimestre con un crecimiento de la economía del 0,2%, desde el 1,5% anterior. Las principales instituciones económicas descuentan el escenario recesivo entre finales de este año y principios de 2023. Además, entra de lleno en un proceso de estanflación que aboca a un fuerte aumento del paro.
Los PMI, indicadores clave sobre la marcha de todos los sectores productivos, encadenan varios meses por debajo de 50 puntos, nivel que marca la diferencia entre expansión y contracción. Standard & Poor’s, agencia que los publica, habla de «recesión inminente» en la eurozona con una especial preocupación por la economía alemana. Alemania terminó el último trimestre con un crecimiento del 0,3%, parejo al de España, siendo Berlín el motor económico de la eurozona. El de Francia también ha bajado al 0,2%.
Lagarde quiso mostrarse muy clara al afirmar que su único mandato es «garantizar la estabilidad de precios. Estamos comprometidos a ello y no hay dudas. No hemos acabado y aún hay camino por recorrer». El objetivo es lograr una inflación del 2% y está en el 9,9%, máximos históricos.
Pero el comunicado del Consejo de Gobierno y las palabras de Lagarde en rueda de prensa deslizaron que tendrán en cuenta la evolución de la economía, aunque, a diferencia de la Reserva Federal de Estados Unidos, no tienen el doble mandato de proteger también el crecimiento. «Hemos hecho un progreso sustancial a la hora de retirar la acomodación monetaria. También tendremos en cuenta la dimensión de las medidas que hemos tomado hasta ahora y que estas actúan con cierto retraso sobre la economía. No estamos ciegos ante el mayor riesgo de recesión y estamos preocupados especialmente por las familias más vulnerables», remacharon.
Las firmas de inversión y los analistas se tomaron muy enserio sus palabras y ahora «las palomas (los banqueros que apuestan por una política monetaria acomodaticia) comienzan a picotear a los pies de los halcones (los que prefieren más agresividad)», resumen desde Nomura. Pese a las palabras de Lagarde, firmas especializadas como el exchange Monex Europe consideran que la presidenta se mostró «obstinadamente en contra de más orientaciones de política monetaria para los mercados».
El banco suizo Julius Baer va a más y aseguran que el BCE apostará por cerrar el año con una subida de tipos de 0,25 puntos, hasta el 2,25%, y que será la última pues creen que el banco central «ha ignorado las señales de advertencia de la desaceleración de la dinámica crediticia tal y como revela su propia encuesta sobre préstamos bancarios».
Los cambios de parecer del mercado provocan que la opción de 0,5 puntos en diciembre gane mucho enteros y que el pico de los tipos de interés llegue, como máximo, al 3% en el principal, niveles de octubre de 2008, desde el 3,5% calculado hasta el viernes, también una zona no vista desde el mismo mes de dicho año. Es decir, una subida de 0,5 enteros en diciembre, hasta el 2,50%, y dos de 0,25 unidades desde enero, hasta el 3% en junio.
Bajo este pensamiento se mueve Pimco, la mayor gestora de fondos de renta fija del mundo, o Deutsche Bank, apoyándose en la recesión que se descuenta para la zona del euro entre finales de este año y comienzos de 2023. También hay brokers que están apostando con fuerza en las últimas 24 horas, según diferentes medios financieros, a opciones sobre el euríbor, el principal índice de referencia para las hipotecas, a que los tipos de interés no pasarán del 3%, aunque hay otras voces en los mercados financieros que han reafirmado sus perspectivas de una alta agresividad del BCE.
«Tendrá que subir con mayor intensidad que la Reserva Federal en 2023 porque no se ven señales en los índices de inflación general y subyacente de la eurozona de que hayan alcanzado el pico», explican en Ebury. Natixis es más claro y pide al organismo un incremento de un punto en la última reunión del año: «El BCE deberá elevar los tipos de interés hasta el 3% a final de año ya que un nivel inferior no es creíble frente a la actual dinámica inflacionista».