Montero miente en el Congreso: la deuda no ha bajado cuatro trimestres sino que sube 62.000 millones

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, no ha dicho toda la verdad este jueves en el Congreso durante su discurso en el debate de estabilidad presupuestaria. Montero ha señalado que «llevamos cuatro trimestres consecutivos rebajando la deuda pública y mejorando nuestras cuentas públicas», algo que no es cierto puesto que la deuda ha crecido desde junio de 2021 hasta julio de 2022 -último dato publicado- en 62.260 millones, según el Banco de España.

Según los datos oficiales que publica la entidad, en junio de 2021 la deuda pública del conjunto de las administraciones públicas ascendía a 1,424 billones de euros, mientras que en julio de este año se ha situado en 1,487 billones. En definitiva, la deuda no ha bajado en el último año, como ha asegurado la ministra para ‘vender’ la gestión del actual Gobierno, sino que ha crecido en 62.260 millones de euros. Cada español debe ya más de 31.000 euros, frente a los algo más de 25.000 euros que debía cuando Pedro Sánchez llegó al poder en junio de 2018.

Tampoco ha caído la deuda sólo de la Administración central, exclusiva competencia de Sánchez. En junio de 2021 era de 1,235 billones mientras que en julio de 2022 asciende a 1,307 billones, según el Banco de España.

La ministra de Hacienda por tanto ha querido engañar a los diputados y a los ciudadanos y vender que su Gobierno está reduciendo la deuda, algo que no es verdad. Sí está cayendo el ratio deuda sobre PIB, que roza el 120%, pero sólo porque el PIB está creciendo a un ritmo mayor en estos momentos por el efecto rebote de la economía tras el fiasco de 2020, cuando el PIB de España se hundió más de un 11%.

Pero la realidad es que el Gobierno tiene poco que presumir, a tenor de lo que dicen los expertos sobre la estabilidad financiera. Porque tanto el Banco de España como la AIReF han criticado que con los planes del Ejecutivo la deuda y el déficit sólo van a bajar en los próximos años porque subirá el PIB, no porque el Gobierno haya tomado medidas de recorte de gasto para hacer las cuentas más fiables de cara al inversor extranjero.

De hecho, tanto el Banco de España como la AIReF aseguran que el déficit estructural quedará en el 4%, mientras piden al Gobierno una política de consolidación fiscal a medio plazo «creíble».

Vigilancia de Bruselas

Tampoco ha dicho toda la verdad la ministra de Hacienda sobre la autoría de la salida de España del procedimiento de vigilancia de Europa por déficit excesivo -3%-.  La Comisión pidió formalmente sacar a la economía española de este sistema de vigilancia en junio de 2019 al constatar que a cierre de 2018 ya había situado su déficit por debajo del 3%. Estaba en ese sistema desde 2009.

Montero ha señalado este jueves que «con el Gobierno de Sánchez» España ha salido de este sistema de vigilancia. La realidad es que Sánchez entró en Moncloa en junio de 2018, cuando el déficit ya estaba por debajo del 3% gracias a los Presupuestos del PP.