La mansión de 22 millones de Orcel en Andratx tiene un embargo por no pagar 100.000 € a sus carpinteros

La villa de lujo de Andratx del banquero italiano Andrea Orcel tiene un embargo preventivo porque adeuda más de 100.000 euros a la empresa que le realizó toda la carpintería interior. En concreto, la nota simple de la vivienda, expedida por el Registro de la Propiedad de Palma de Mallorca, incluye una «anotación preventiva de embargo letra G en fecha 09-12-2021, a favor de la entidad Fusteria Font SA, en reclamación de un importe total de 100.671 euros, según mandamiento del Juzgado de primera instancia número 19 de Palma de Mallorca, de fecha 20-09-2021, procedimiento medidas cautelares 1222/2020».

Desde la empresa de carpintería explican a OKDIARIO que aún no han cobrado la citada cantidad, que se le adeuda por los trabajos de «toda la carpintería de la obra» de la vivienda, que cuenta con cerca de 700 metros cuadros y se erige sobre una parcela de más de 6.000 metros cuadrados. En este sentido, Fusteria Font apunta que, actualmente, el asunto «está en mano de los abogados» y que, aunque la anotación preventiva de embargo data de diciembre del año pasado, la factura se adeuda desde hace más tiempo.

La impresionante villa de Andrea Orcel se encuentra Puerto Andratx y está valorada en unos 22 millones de euros, según distintas fuentes. La vivienda de estilo moderno dispone de tres plantas -todas ellas con grandes ventanales-, varios porches, una imponente piscina infinity y un inmenso jardín atestado de una gran variedad de plantas y árboles que se entrelazan con la fachada.

Según consta en el Registro de la Propiedad de Palma de Mallorca, la vivienda es propiedad de Andrea Orcel y de su mujer, Clara Batalim-Orcel, al 50%. La compra del inmueble se cerró en enero de 2016 y para su adquisición el banquero firmó una hipoteca por valor de más de 4,86 millones de euros con Bankinter, a un plazo de 20 años.

¿Quién es Orcel?

Andrea Orcel es un banquero de inversiones que se hizo famoso (y muy rico) en el antiguo Merrill Lynch como banquero de cabecera del fallecido Emilio Botín; fue el diseñador de sus grandes operaciones corporativas, como la de Antonveneta en Italia. Posteriormente, fue presidente de UBS Investment Bank desde junio de 2012, puesto desde el que diseñó la compra del Banco Popular en 2017. En septiembre de 2018, Ana Botín anunció que se convertiría en el nuevo consejero delegado de Banco Santander a principios de 2019. Sin embargo, el fichaje se truncó y terminó en una batalla judicial.

A principios de enero de 2019, el banco español comunicó que daba marcha atrás en su decisión de contratar al italiano porque tendría “un coste inaceptable”, al tener que hacer frente en su totalidad al bonus en diferido que UBS le adeudaba y que se negó a abonar a Orcel cuando fue fichado por la entidad cántabra. En la carta oferta para su contratación, Orcel se comprometía a hacer sus mejores esfuerzos para convencer a UBS, pero no garantizaba su éxito; es decir, el fichaje no estaba supeditado a que UBS abonara el bonus, razón por la cual el italiano ganó el juicio en primera instancia en Madrid en diciembre del año pasado.

La indemnización inicial ascendía a 68 millones, la mayor de la historia de España, pero posteriormente el juez la rebajó a 51. A día de hoy, el banco liderado por Ana Botín ya ha pagado al banquero el 80% -equivalente a unos 41,6 millones de euros- de la indemnización con la que la Justicia ordenó que se le resarciera por su fichaje frustrado. No obstante, la entidad ha recurrido la sentencia ante la Audiencia Provincial y espera que esta cantidad le sea devuelta con intereses.