Hungría descubre un yacimiento de petróleo y no lo repartirá con la UE: extraerá 1.200 barriles diarios
El país que dirige Viktor Orbán tiene como objetivo conseguir la autosuficiencia energética


Hungría acaba de descubrir un yacimiento de petróleo en sus tierras que le permitirá extraer alrededor de 1.200 barriles al día, según ha podido conocer OKDIARIO a través de fuentes cercanas. Las mismas fuentes indican que el país que dirige Viktor Orbán no tiene intención de repartir la materia prima con el resto de países de la Unión Europea (UE), sino que su plan es utilizar todo el crudo para consumo interno.
Una decisión que perjudica al conjunto de los países comunitarios. Estas naciones se encuentran en una relativa crisis de energía tras la paralización de las importaciones de gas ruso. Las consecuencias de esta situación se aminoran de dos formas: la producción propia y la compra de Gas Natural Licuado (GNL) a Estados Unidos.
Ambos recursos son más caros que el gas ruso. El primero requiere de inversión y sus frutos aparecen a largo plazo. El segundo cuesta más que la importación rusa porque el GNL requiere de un tratamiento de gasificación en suelo europeo, ya que llega por barco.
El petróleo de Hungría
Por ello, el descubrimiento del yacimiento de petróleo en suelo de la UE podría ser una buena noticia. Sin embargo, los húngaros han decidido dedicar todo el combustible extraído para abastecer sus propias necesidades, sin salir de su frontera.
«MOL, la petrolera de bandera de Hungría, ha encontrado un depósito de petróleo del que esperan sacar 1.200 barriles por día», explican a este periódico las fuentes cercanas. El descubrimiento se ha dado en el Condado de Somogy, al suroeste de Hungría.
En la actualidad, «la mitad del petróleo usado en Hungría es de producción local», por lo que el país ya tiene costumbre de reservar para sí todo el crudo que hay en sus tierras.
Con el nuevo yacimiento, la nación liderada por Viktor Orbán se reafirma en esta línea. Y es que las fuentes indican que el país busca «asegurar un poco más su autosuficiencia energética». Un objetivo más que entendible teniendo en cuenta su contexto geográfico, pues es un territorio muy cercano a Rusia.
Consumo de crudo en la UE
Según explica Transport & Environment (T&E), en enero de 2022, Rusia era responsable del 31% de las importaciones de petróleo en Europa. Sin embargo, para marzo de 2023, esta cifra se había desplomado al 3% debido a las sanciones impuestas tras la invasión de Ucrania.
A pesar de esto, Europa no ha reducido su consumo de petróleo, sino que ha diversificado sus proveedores. España, por ejemplo, ha incrementado sus compras a Brasil (+170%), Estados Unidos (+60%), Angola (+240%), Iraq (+40%) y Canadá (+62%), además de recurrir a países de Hispanoamérica como Colombia, Venezuela, Ecuador y Trinidad y Tobago.
Esta diversificación ha coincidido con un aumento global en la producción y exportación de petróleo. Entre 2021 y 2022, el 70% del incremento en la producción de petróleo de Estados Unidos fue destinado al mercado europeo. Aunque el consumo de gas en Europa cayó un 15% durante este periodo, el consumo de petróleo ha aumentado un 2% desde el inicio de la invasión rusa.
El transporte es el principal impulsor de esta demanda persistente. El tráfico por carretera ha regresado a niveles prepandemia, mientras que el sector de la aviación alcanzará su mayor actividad hacia finales de año. En este contexto, empresas como Shell han optado por abandonar sus metas de reducción de producción de petróleo, priorizando el aumento de beneficios.
Si Europa logra cumplir con sus objetivos climáticos actuales, los analistas esperan que para 2030 la demanda de petróleo disminuya un 16%. No obstante, un estudio de T&E concluye que el continente podría reducir esta demanda hasta en un tercio mediante la implementación de medidas más ambiciosas. Las estrategias que propone esta organización son acelerar la electrificación del transporte por carretera, establecer límites de velocidad y reducir el tráfico aéreo.