Francia recupera ya el paro anterior a la pandemia mientras España tiene 528.000 más

El paro se desboca en España. El numero de españoles que se encuentra en situación de desempleo ha crecido en 528.000 personas en comparación con los niveles previos a la crisis del coronavirus, ya que ha pasado de 3.191.900 parados en 2019 a 3.719.800 al cierre de 2020. Lejos de los datos que ha registrado Francia, que ya ha conseguido recuperar las cifras de desempleo pre-covid hasta cerrar el año con 2,4 millones de desempleados gracias a las medidas económicas adoptadas por el Gobierno de Emmanuel Macron.

Según la Encuesta de Población de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de empleo ha crecido en casi tres puntos en el año marcado por la pandemia hasta situarse en el 16,13% -una de las más altas del mundo desarrollado-. La subida del paro ha roto con siete años de bajadas del desempleo y el peor dato que se registra desde 2009, cuando el desempleo aumentó en casi 800.000 personas por el impacto de la crisis financiera.

No obstante, hay que tener en cuenta que estos datos no contabilizan los trabajadores que se encuentran en suspensión de empleo o reducción horaria como consecuencia de un expediente de regulación temporal del empleo (ERTE), que no ha conseguido frenar el aumento del desempleo en España. Un herramienta de la que ha presumido el Gobierno de Pedro Sánchez desde el inicio de la pandemia a pesar del caos que ha provocado en el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

El ‘año de la pandemia’ finalizó con 19.048.433 afiliados medios, lo que supone 26.432 cotizantes más que en noviembre (+0,1%), pero 360.000 menos que un año antes, ante el efecto que la pandemia de Covid ha tenido en el contexto laboral de nuestro país. La pérdida de afiliados medios en 2020 pone fin a seis años de incrementos anuales consecutivos. No se registraba un descenso de la afiliación desde 2013 (-85.041 cotizantes), aunque hay que remontarse a 2012 para encontrar un descenso mayor que el sufrido en el año del Covid.

Francia recupera los niveles pre-crisis

Mientras, Francia cerró 2020 con 2,4 millones de desempleados hasta alcanzar un nivel similar al de antes del impacto de la crisis del coronavirus, según ha publicado este martes el Instituto Nacional de Estadística (INSEE). Un escenario que ha provocado que la tasa de empleo en el país galo se haya situado una décima por debajo de la registrada a finales de 2019.

El desempleo en la segunda economía más grande de la zona euro se redujo en 1,1 puntos porcentuales, hasta el 8%, según mostraron datos oficiales publicados el martes. El dato contrasta con el 9,1% revisado del tercer trimestre y el 8,1% de los últimos tres meses de 2019. En concreto, la caída de de la tasa de paro en el cuarto trimestre del año afectó a todas las edades, aunque fue más pronunciada entre los menores de 25 años, donde cayó 3,6 puntos, mientras que la bajada fue de 1 punto entre los que tienen entre 25 y 49 años y de 4 décimas entre los mayores de 50.

De esta forma, la tasa de desempleo entre los jóvenes se situó a finales de 2020 en el 18,4%, 1,5 puntos menos que el año anterior, mientras que en la categoría de entre 25 y 49 años subió una décima, al 7,5% y cayó una décima entre los senior, hasta el 5,7%. Mientras, España presume de tener el mayor número de jóvenes desempleados de Europa, ya que cuatro de cada diez no tienen trabajo.

Por su parte, la caída interanual del desempleo fue algo superior entre los hombres, dos décimas, para situarse en el 8%, que entre las mujeres, donde cayó una décima y se colocó en el 7,9%. Pero la caída trimestral fue particularmente marcada entre las mujeres jóvenes, donde el descenso fue de 4,6 puntos.

No obstante, el organismo estadístico galo ha explicado que, junto a la creación de empleo, la bajada del desempleo esconde «un espejismo», puesto que responde al hecho de que durante el segundo confinamiento decretado para frenar la pandemia a finales de octubre, «un número importante de personas pasó a la inactividad». Además, recordó que ante la imposibilidad de poder buscar empleo en condiciones habituales, muchas personas dejaron de hacerlo, lo que les elimina en las estadísticas para ser considerados desempleados.

Antes de que estallara la pandemia, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, aspiraba a reducir el desempleo al 7% para el final de su mandato de cinco años, en 2022. Heredó una tasa de desempleo del 9,5% en mayo de 2017 y se propuso liberalizar el mercado laboral. Una meta que continúa pero que se ha retrasado por el golpe que ha asestado la crisis del coronavirus al empleo.