La Fed rebaja 25 puntos básicos los tipos de interés: la guerra entre Powell y Trump se recrudece en EEUU
La Reserva Federal de Estados Unidos ha apostado hoy por un recorte moderado de los tipos de interés, reduciendo su rango objetivo en 25 puntos básicos


La Reserva Federal de EUU rebaja los tipos de interés en 25 puntos básicos, situándo el tipo oficial entre el 4,00 % y el 4,25 %. No por esperado deja de llamar la atención el recorte de tipos. El entorno económico se ha vuelto complicado, el empleo en EEUU se resintió según los últimos datos, con una inflación creciente por culpa de los aranceles, y la guerra de Donald Trump contra Jerome Powell, presidente de la Fed, ha tocado su punto álgido.
En ese escenario, el banco central de Powell ha ajustado sus proyecciones macroeconómicas para los próximos años y ha dado señales de que los recortes adicionales serán más cautelosos y espaciados de lo que el mercado estimaba hasta ahora.
¿Qué ha cambiado?
La Fed reconoció en su comunicado que la inflación, aunque ha mostrado signos de desaceleración, continúa siendo más persistente de lo deseado, especialmente en componentes clave que afectan los precios al consumidor. Esta rigidez reduce el margen de maniobra para bajadas agresivas de los tipos. Al mismo tiempo, el mercado laboral presenta signos de enfriamiento: el crecimiento del empleo es más modesto, las nóminas no agrícolas han decepcionado en los últimos meses y la tasa de desempleo ha mostrado leves aumentos en ciertas regiones, lo que sugiere que la economía estadounidense puede estar acercándose a un punto de inflexión.
Proyecciones económicas y “dot-plot”
Una de las novedades más esperadas era el diagrama de puntos (“dot-plot”), que refleja las expectativas de los miembros del FOMC, que es el comité que vota si subir o bajar los tipos. En el gráfico se observa si todos se mantienen sin alterar su pensamiento, sin varían y prefieren subir, bajar… sirve para intuir la intención y los próximos movimientos de tipos de interés en EEUU.
Hasta ahora, muchos inversores habían anticipado recortes por un total de 50 puntos básicos antes de que acabase el año. Pero el consenso es más moderado ahora, y podríamos no ver otra bajada. Algo que seguro va a avivar la guerra entre Trump y Powell, porque el presidente estadounidense quiere que se produzcan mayores recortes, de forma más rápida, para incentivar el crecimiento económico en su país. Sin embargo, para 2026, las expectativas se sitúan en niveles inferiores a los previstos en junio, aunque siguen apuntando también, al menos, a dos nuevos recortes.
Esta moderación implicará, según las autoridades, un enfoque flexible dependiendo de los datos reales (inflación, empleo, productividad) y los riesgos externos, como la incertidumbre geopolítica o las fluctuaciones en los precios de la energía.
Reacciones del mercado
Los mercados financieros respondieron con una mezcla de alivio y decepción. Por un lado, el recorte era algo esperado: las herramientas de previsión, como la FedWatch de CME, le otorgaban una probabilidad superior al 90 % antes de la reunión.
Pero muchos inversores esperaban algo más ambicioso, incluso un recorte de 50 puntos básicos‒ en vista de la gradual debilidad del mercado laboral. Este resultado ha generado cierta inquietud de que la Fed esté ya reaccionando tarde, más que anticipándose.
Implicaciones para la economía real
Para consumidores y empresas, una bajada de los tipos como la de hoy deja un entorno algo más favorable para el crédito: hipotecas, préstamos de consumo e inversión empresarial se beneficiarán, aunque en menor medida que si el recorte hubiese sido mayor. Los costes de financiación seguirán siendo relativamente elevados aunque en descenso, por lo que muchas decisiones dependerán del grado de confianza en la estabilidad macroeconómica.
En política económica nacional e internacional, este movimiento podría aliviar presiones para que otras grandes economías mantengan políticas más rígidas. En Europa, por ejemplo, donde la inflación también es un tema sensible, la decisión de la Fed puede influir en las expectativas de los mercados de deuda, tipo de cambio y flujos financieros. El dólar ha sufrido una leve depreciación frente al euro tras conocerse la decisión, ya que el mercado esperaba una reducción más agresiva que hubiera debilitado aún más la moneda estadounidense.