Los expertos creen que el oro saldrá fortalecido ante el alza de la inflación
El oro, uno de los activos considerado «refugio» en momentos de incertidumbre, cotiza sostenido a pesar de la guerra en Ucrania, pero los expertos creen que puede salir fortalecido ante el alza de la inflación, aunque advierten de que las subidas de los tipos pueden actuar como un viento en contra.
El precio del metal precioso se disparó durante la crisis provocada por el coronavirus y en agosto de 2020 alcanzó máximos históricos, por encima de los 2.000 dólares por onza. Tras el estallido de la guerra en Ucrania, el oro volvió a revalorizarse con fuerza, y en marzo de este año tocó un nuevo máximo, cerca de los 2.080 dólares.
No obstante, días después se desinfló y desde ese momento su precio se ha mantenido estable, sin volver a revalidar máximos. Actualmente, su cotización ronda los 1.980 dólares por onza. Si bien desde el inicio del año acumula una revalorización de más del 8% y desde el estallido de la guerra en Ucrania, el pasado 24 de febrero, del 3,5%.
Los analistas de XTB a Efe recuerdan que en periodos de fuerte incertidumbre y presiones inflacionistas, el oro ha sido históricamente un valor refugio, ya que el dinero tiende a depreciarse. Y en un contexto como el actual, donde la inflación se encuentra en máximos de cuarenta años, el oro puede salir «nuevamente fortalecido en un entorno con alto riesgo de estanflación».
Explican que las presiones inflacionistas, que en un principio se analizaron en un contexto transitorio mientras se solucionaban los problemas logísticos derivados de la pandemia, se han extendido ahora de forma generalizada a todos los segmentos de la economía, y que la guerra en Ucrania «ha complicado aún más la situación».
La evolución del oro, advierten, estará ligada al triángulo compuesto por el crecimiento económico, la inflación y el nivel de tipos de interés. De la misma manera, los analistas del banco privado suizo Julius Baer recuerdan que el oro se ha mantenido estable, y dado que la guerra en Ucrania parece no tener solución a la vista, el movimiento que ha registrado el metal en las últimas semanas «puede parecer sorprendente».
Explican que hay vientos a favor y vientos en contra que impactan en la cotización del oro, lo que en última instancia ha dado lugar a un patrón de precios limitado. En cuanto a los «vientos de cola» que favorecen su cotización, destacan la fuerte demanda de los valores refugio.
Mientras, sobre los factores que pueden afectar a su precio, indican que proceden principalmente del dólar estadounidense, que también es un refugio seguro en tiempos de crisis, y de los rendimientos de los bonos reales de EEUU.
Impacto de la guerra
Para el futuro, explican, «la cuestión clave para el oro sigue siendo si los riesgos económicos o del mercado financiero relacionados con la guerra están aumentando o disminuyendo». «El aumento de estos riesgos significaría un alza de los precios, mientras que si los riesgos se reducen, el oro quedaría estancado o algo más bajo», estiman.
Por otro lado, los analistas de Allianz ven que para el futuro y para los próximos meses y trimestres los acontecimientos económicos serán decisivos para el oro. «La dinámica de la inflación aboga por una nueva subida del precio del metal precioso. En cambio, las subidas de los tipos de interés previstas son un viento en contra, sobre todo si también provocan un aumento de los tipos de interés reales. Esto aumentaría los costes de poseer oro», concluyen.