La excusa falsa de Ábalos para reunirse con Delcy: Duro Felguera nunca cobró la deuda de Venezuela
La excusa utilizada por el ex ministro de Transportes, José Luis Ábalos, para justificar su reunión ilegal con la vicepresidenta chavista de Venezuela, Delcy Rodríguez, en el Aeropuerto de Barajas es falsa: Duro Felguera no ha cobrado a día de hoy la «importante deuda» que tenía el Gobierno de Venezuela con ella y que, según Ábalos, había sido saldada gracias a sus gestiones con dicho Ejecutivo.
Como informó este jueves OKDIARIO, el entonces titular de Transportes informó a Pedro Sánchez de la petición de la número dos de Nicolás Maduro con un mensaje en enero de 2020 que decía: «Y para acabar de molestarte, la vicepresidenta de Venezuela viene en privado el lunes, quiere verme discretamente como continuación del encuentro que tuve con el ministro de Comunicación (que es su hermano). La gestión que acordamos en favor de las empresas españolas ha permitido que Duro Felguera haya cobrado una importante deuda». A lo que el presidente del Gobierno respondió: «Bien».
La realidad es que Duro Felguera no había cobrado entonces esa deuda y sigue sin cobrarla a día de hoy. Como informó en su día este periódico, dicha deuda asciende a unos 120 millones de euros, una cantidad muy relevante para su tamaño y sospechosamente similar al rescate concedido por la SEPI a la empresa asturiana durante la pandemia.
Es decir, la justificación que dio Ábalos a Sánchez para reunirse con Delcy Rodríguez era falsa y las supuestas gestiones que había realizado con el régimen venezolano para el cobro de esa deuda por Duro Felguera no habían dado resultado ni lo han dado en los años posteriores. De hecho, la compañía la considera «incobrable».
El caso Termocentro
Esta deuda proviene de la construcción de la central de ciclo combinado (electricidad generada con gas) Termocentro, que es la que suministra electricidad a Caracas. Duro Felguera divide este agujero en dos partes. Por un lado, la cantidad de 23,254 millones de coste inicial que Maduro no le paga desde febrero de 2017. Pero esta deuda debe traerse a valor actual debido a la hiperinflación que sufre el país caribeño, lo que le llevó a provisionar (apuntarse como pérdida) 74,842 millones en 2019. Lógicamente, ese valor es mayor a día de hoy debido a la inflación acumulada desde entonces.
A eso se suman los intereses de demora devengados, que la empresa cuantifica en «72.475 miles [72,475 millones] de euros equivalentes» en sus cuentas anuales de 2023. Y añade que «no están contabilizados ante la falta de pago y, por tanto, se consideran activos contingentes», es decir, no se los apunta en su balance porque considera que no va a cobrarlos nunca.
«La complejidad asociada a algunos de estos procesos hace que exista un alto grado de incertidumbre asociada a la probabilidad y sentido de su resolución, así como a la cuantificación de sus potenciales consecuencias económicas», añade Duro Felguera en su memoria anual.
Esta situación es todavía más compleja por cuanto la Audiencia Nacional va a sentar en el banquillo a Duro Felguera por el presunto pago de comisiones por valor de 105 millones de dólares a personajes próximos al chavismo para la obtención del contrato de la citada central Termocentro.
La Brigada de Investigación contra el Blanqueo de Capitales de la Policía Nacional acreditó que los 54 millones fueron transferidos a cuentas bancarias de Suiza, Mónaco, Andorra, Bahamas, las Islas Barbados y Florida (EEUU), presuntamente vinculadas con personajes de la órbita chavista.
Como es lógico, Duro Felguera niega los hechos, que deberá determinar el juez. Si finalmente se consideran probados, la empresa asturiana habría pagado comisiones al régimen de Maduro para conseguir una obra que no ha cobrado ni va a cobrar nunca, a pesar de las supuestas gestiones de Ábalos con Delcy Rodríguez.