El BCE alerta de la fuga de depósitos tras la veloz adopción de las ‘stablecoins’ por parte de la banca
Los inversores han retirado cerca de 3.500 millones de dólares del Bitcoin en el último mes mientras crecen temores de una burbuja
El Banco Central Europeo (BCE) y un creciente coro de reguladores en Europa han puesto bajo la lupa la veloz adopción de las stablecoins, monedas digitales que, a diferencia de criptomonedas como Bitcoin o Ethereum, están respaldadas por divisas fiat, como euros o dólares. Estos tókens, cuyo nombre se presta de la palabra inglés de ‘estable’, se consideran inversiones más seguras que las criptodivisas de referencia, que carecen de vínculos a divisas reales.
El BCE ha alertado este lunes que la adopción por parte de las instituciones financieras «podría introducir riesgos para la estabilidad financiera en el futuro», según una previa de su de su revisión de la estabilidad financiera. En concreto, podría disminuir depósitos en la banca española y podría implicar riesgos para el sistema financiero global. «El crecimiento significativo de las stablecoins podría provocar salidas de depósitos minoristas, lo que reduciría una importante fuente de financiación para los bancos y los dejaría con una financiación volátil», han alertado. El tamaño de mercado de estas divisas digitales asciende ahora hasta los 280.000 millones de dólares (242.443 millones de euros), según estimaciones del propio banco central.
Los avisos desde Fráncfort llegan en un momento de rápida adopción de estas llamadas stablecoins por parte de la banca en el Viejo Continente y Wall Street. No pasa una semana sin que uno de los prestamistas de referencia en España anuncia un nuevo servicio de custodia de stablecoins: BBVA, CaixaBank, junto a ING y la italiana, Unicredit, además de la entidad que preside Ana Botín, el Banco Santander, han desvelado planes en los últimos meses. La entrada de la banca europea en este rincón muy frenético de los mercados financieros, y hasta ahora, muy rezagada de las finanzas tradicionales, han despertado dudas dentro de los reguladores que dieron el visto bueno a su adopción.
Las alarmas por parte del vigilante monetario europeo también han subido de volumen en un momento de pánico para el mundo de criptodivisas y las finanzas descentralizadas en su conjunto. Los inversores han retirado cerca de 3.500 millones de dólares de ETFs denominados en Bitcoin en el último mes, según datos de la agencia Bloomberg, en un momento de vértigo para el mercado. Así, el Bitcoin ha experimentado su peor momento en la historia de la moneda digital, con una caída del 21% en apenas un mes. En el año, retrocede un 20%.
Aunque las stablecoins se consideran inversiones más seguras que las criptomonedas, también conllevan riesgos, según el BCE. Entre ellos, una retirada masiva de fondos, si los inversores pierden confianza en su rentabilidad, al igual de la tendencia que se ha observado en el comportamiento del Bitcoin en las últimas semanas. «La principal vulnerabilidad de las stablecoins es que los inversores pierdan la confianza en que puedan canjearse a su valor nominal», han explicado. «Esta pérdida de confianza puede desencadenar simultáneamente una retirada masiva de stablecoins y provocar un evento de desvinculación».