La logística y el transporte en España suponen el 8% del PIB y y emplean a 800.000 personas
En demasiadas ocasiones se habla del modelo económico español desde un profundo desconocimiento. Todo el mundo sabe que el turismo y el ladrillo son importantes, pero ¿qué sectores representan el resto del porcentaje que configura nuestro PIB? Le prestamos atención y cuidado a los otros responsables de que la economía española crezca por encima de la media europea?
Aunque no lo sepan, yo tampoco hasta hace unos horas, el sector de la Logística y el Transporte en nuestro país supone el 7,8% del Producto Interior Bruto (PIB) y moverá un volumen de negocio de unos 110.000 millones de euros este año, abarcando unos 800.000 empleos. Unos datos que sirven para que vayamos aterrizando en la importancia que todo esto supone.
Si les cuento que la primera empresa mundial del sector se llama Amazon, la segunda Apple pero que otro de los pesos pesados se llama Inditex, esto puede dejarles un poco desconcertados. Hablamos de la logística y el transporte, un sector al que la imagen y percepción que se tiene desde fuera ayuda poco, a pesar de que es de los que más crece y más empleabilidad tiene.
Recientemente, José Luis Carles Fernández, consultor experto en investigación y empleo de IMF Business School ha elaborado un profuso informe para conocer todos los detalles de un sector al que se cuida poco a pesar de su importancia.
Los datos de su estudio, al que ha tenido acceso OKDIARIO, constatan las expectativas de crecimiento de las empresas que componen este segmento de mercado, con la incidencia del comercio electrónico y los retos a los que se enfrenta, como los nuevos perfiles y un problema de atracción de profesionales, tanto de los jóvenes como los de alta cualificación. “Sigue existiendo esa imagen del sector como generador de trabajo poco cualificado y antiguo”, explica Fernández.
Importantes actores del mencionado sector reivindican la visibilidad que necesita y explican la necesidad de comunicar lo que hay detrás de ese casi 8% del PIB. “Necesitamos visibilidad”, constata Jorge Díaz, director sectorial de Transporte y Logística de Adecco. “La logística es una profesión invisible”, comenta José Estrada, director general de CEL. Pero también hay dosis de autocrítica. “Los empresarios del transporte hablan mal de sí mismos”, reconoce Ramón Valdivia, director general de ASTIC. “Hemos transmitido una mala imagen, y a pesar de ser un sector tan inmenso, la gente lo reduce a mensajería y paquetería”, matiza Lucio Fernández, director de Recursos Humanos de Redyser.
La formación, los costes y la digitalización. Tres cuestiones que deben abordarse desde las propias empresas. Porque la evolución del sector requiere nuevos perfiles, conocimiento de idiomas y de nuevas tecnologías. “Necesitamos de todo, especialmente formación en los conductores”, aclara Margarita Basante, directora de Recursos Humanos de Global Spedition. “Nos faltan tantos conductores que hay muchos camiones parados en España por este tema”, añade Ramón Valdivia, de ASTIC.
La adaptación a los nuevos tiempos pasa también por actualizarse en términos de políticas de sostenibilidad y la digitalización, denuncian los mencionados directivos, ya que es hacia donde van las empresas europeas, como apunta Luisa López Leza, directora de López Leza Consultores. “No somos capaces de atraer talento joven y un tercio de los empleados es mayor de 50 años, con las dificultades que eso supone para los trabajos que se desempeñan”. Un sector, por cierto, que tiene como asignatura pendiente la incorporación de las mujeres, aunque las nuevas necesidades sí encajan con su entrada en estas empresas hasta ahora eminentemente masculinas.
Y hablando de formación, todos los directivos consultados coinciden en la necesidad de comunicar lo que hace este sector acudiendo a colegios, institutos y universidades. “Os sorprendería lo poco que se conoce y lo poco que tiene en cuenta la formación en estas habilidades”, apunta Tomás García, director del Grado en Ciencias del Transporte y la Logística de la UCJC, una de las pocas que se imparten en España.
Por último, decir que se trata de un sector intensivo en mano de obra lo que ayudaría a España a continuar su senda de reducción del desempleo sobre todo juvenil. Como afirman los expertos consultados la incidencia y los volúmenes del comercio electrónico suponen una enorme oportunidad para las empresas del sector.