Enzo Fernández es otro de los nombres propios de esta Argentina campeona del mundo. El mediocentro del Benfica ha tenido una importancia capital para el esquema de Lionel Scaloni durante este Mundial de Qatar. Comenzó los dos primeros partidos como suplente, pero el gran gol ante México en la segunda jornada de la fase de grupos le dio la titularidad inmediata ante Polonia. Fue desde entonces cuando cogió las riendas del centro del campo junto a De Paul y Mac Allister para llevar a Argentina a lograr la tercera estrella de su historia. Su gran Mundial le abre las puertas de un gran equipo y el Real Madrid es uno de ellos.
El conjunto blanco se mueve para seguir atrayendo talento joven a su equipo y el mediocampo es la siguiente posición a reforzar. Con el futuro de Modric y Kroos en el aire, el Real Madrid tiene entre ceja y ceja a Bellingham, pero su elevadísimo coste dificulta que la operación se lleve a cabo. Por ello, Enzo Fernández es una de las serias opciones para ser el dueño del Nuevo Bernabéu para la próxima década.
La derrota en el partido inaugural ante Arabia Saudí dejó a los argentinos helados. Esto provocó que Scaloni tuviera que cambiar varios jugadores para el partido decisivo ante México en la segunda jornada. Una derrota les enviaba a casa, pero Enzo Fernández no fue uno de los elegidos para ser de la partida, por lo que tuvo que esperar por segundo partido consecutivo desde el banquillo. Fue en el minuto 57 y con 0-0 en el marcador cuando el técnico elegía a Enzo como primer cambio para revolucionar el encuentro.
Siete minutos más tarde, Leo Messi anotaba el primer gol del encuentro para seguir vivos en este Mundial. Pero lo que dio realmente alas al jugador del Benfica y darse a conocer a nivel internacional fue el gran gol que anotó por la escuadra para certificar la victoria. Desde entonces, el jugador nacido en 2001, se asentó como titular con su selección para no volver a salir más del campo.
Pleno de minutos
Fue a partir de las rondas de eliminación cuando Enzo se encumbró como una de las figuras de su equipo y jugarse los 90 minutos en todos y cada uno de los partidos. Su juego le dio un gran equilibrio a la Albiceleste y su forma de ver el fútbol le consagró como el dueño del centro del campo. Además, una de sus mayores peligros es y ha sido su gran disparo desde larga distancia, un arma por el que Argentina tenía en sus manos un jugador único.
Fueron pasando las rondas y Enzo Fernández seguía en el campo. Se jugó los 90 minutos contra Australia, los 120 minutos contra Holanda en cuartos de final, hizo lo propio ante Croacia en las semifinales y, por supuesto en la finalísima ante Francia, disputando también los 120 minutos. Mucha cantidad de minutos, pero, sobre todo gran calidad de los mismos. Esto hará que el teléfono del Benfica no deje de sonar durante estas Navidades con el objetivo de llevarse a su nueva estrella.
Precio desorbitado
Cuando Enzo Fernández comenzó a despuntar en este Mundial de Qatar, los rumores daban rienda suelta sobre un posible gran fichaje del jugador a uno de los equipos punteros de Europa. Pero el Benfica no lo pondrá nada fácil para dejar salir a un jugador por el que pagó 12 millones de euros el pasado verano procedente del River Plate. De hecho, en las últimas horas, el equipo portugués habría tasado a Enzo en 118 millones de euros, según informa el medio luso O Jogo.
Esta astronómica cifra provocaría el rechazo de los grandes clubes de Europa, o al menos del Real Madrid. Una cantidad superior a los 100 millones se iría de precio y el conjunto blanco buscaría otras opciones. Por lo que tratar de rebajar las pretensiones económicas del Benfica se antoja vital para que la operación pueda llegar a buen puerto.
