Márquez marca territorio en Alemania

Sachsenring es a Marc Márquez lo que Roland Garros es a Rafa Nadal. Desde que consiguió su primera victoria allí en el año 2010, en su último año en 125cc, nadie ha logrado batirle en ese circuito. El ilerdense es el auténtico rey del Gran Premio de Alemania. Lleva 10 victorias consecutivas en este circuito, siete de ellas en MotoGP. Nunca ha perdido una carrera su circuito fetiche desde que ascendió a la categoría reina, ya que el año pasada esta prueba no se disputó por culpa de la pandemia del Covid-19. Y este viernes marcó el mejor tiempo en los libres del GP de Alemania. Así que el campeón español amenaza con otra epopeya.

Sólo le supera Giacomo Agostini con 13 victorias. La diferencia es que en aquella época los pilotos competían en dos categorías (350cc y 500cc). Sin embargo, el italiano no fue capaz de ganar más de 10 veces seguidas. Márquez tiene ante sí la oportunidad de batir un récord del mejor piloto de todos los tiempos. Aunque no llega en su mejor momento, las mejoras de Honda parece que están dando resultado.

El hexacampeón del mundo de la categoría reina ha conseguido marcar el mejor tiempo en los primeros libres del fin de semana. Este resultado sólo lo había logrado en los libres 3 del GP de Francia. Aunque en los siguientes entrenamientos libres sería duodécimo, este primer puesto coincide con el estreno de unas alas en el carenado, más redondeadas que las que tenía hasta ahora. Las mejoras de Honda empiezan a dar resultado y su piloto estrella empieza a sonreír.

Alemania, territorio Márquez

Aunque la carrera de casa fue la de Montmeló, la de este fin de semana es como si fuera en casa también. Conoce este circuito a la perfección y los resultados demuestran que se le da a las mil maravillas. A pesar de los tres ceros en las últimas tres carreras, Marc, llega muy motivado y físicamente mejor después de conseguir rodar 87 vueltas en los tests de Cataluña. Él mismo reconocía tras estas pruebas que necesitaba un día así para tener continuidad.

Por eso, y pese a las tres últimas caídas, Márquez llega a Alemania dispuesto a dar un salto y pelear por estar más arriba. Es un piloto ambicioso y por ello intentará prolongar su idilio en Sachsenring. El de Cervera quiere volver a recuperar las buenas sensaciones que tenía antes de la fuerte lesión en el húmero del brazo derecho, que le ha mantenido tanto tiempo fuera de los circuitos. Además, no está siendo el año de Honda y una victoria o un podio aquí les permitiría coger confianza de cara a lo que resta de Mundial.