Márquez vuelve a casa
Marc Márquez llega a Barcelona con energías renovadas y la motivación por las nubes. A pesar de las dos caídas en los últimos dos grandes premios, Montmeló es especial para él porque es el circuito de casa
Marc Márquez afronta este fin de semana una carrera ilusionante en casa. Este domingo se celebra el Gran Premio de Cataluña de MotoGP, que será el primero de Europa que permita la entrada del público. Hasta 20.000 personas podrán volver a sentir la adrenalina de ver una carrera de MotoGP en directo. El ilerdense está muy motivado y con ganas de hacer su mejor actuación en Montmeló, delante de sus aficionados.
Honda y Márquez llegan a este gran premio en su peor momento de la temporada. Marc viene de dos caídas consecutivas en Le Mans y Mugello, aunque en el primero se fue al suelo cuando lideraba la carrera. La parte positiva es que le ha permitido llegar mejor físicamente a esta prueba tan especial para él. En un principio se especuló con la posibilidad de volver a parar pero finalmente no será así y podrá disfrutar del gran premio de casa.
Cervera, localidad natal de Márquez, está situada a poco más de una hora del circuito de Montmeló, por lo que el español estará arropado por su gente. Márquez sólo se ha quedado una vez fuera del podio en las siete ocasiones que ha corrido (dos primeros, tres segundos y un tercero). Una caída en 2015 le impidió completar la prueba y tuvo que retirarse, mientras que el año pasado no pudo competir debido a la lesión en el húmero del brazo derecho.
El podio parece un poco lejos pero Marc ha demostrado que cuando se igualan las fuerzas es capaz de competir al mismo nivel que todos, como se vio en Le Mans. Lo cierto es que todavía no está al 100% por lo que sus opciones de acabar entre los tres primeros son mínimas, aunque es un sueño que se pasa por la cabeza del piloto de HRC. Por ahora su objetivo sigue siendo el mismo que el de las últimas carreras, seguir avanzando en su recuperación y ver cómo evolucionan los dolores en el hombro.
El piloto de Cervera quiere olvidar las dos últimas caídas con un buen resultado en casa que le ayude a dar un paso adelante en su recuperación, y le permite afrontar las siguientes carreras con otra cara. Hasta ahora su mejor actuación ha sido un séptimo en Portugal. En Jerez terminó noveno pero cruzó la bandera a cuadros a menos distancia del primer clasificado. Poco a poco va recuperando sensaciones y este domingo puede ser un punto y aparte si consigue salir de Barcelona con buenas sensaciones.