Joan Laporta acusa el golpe por la nueva fuga en su directiva: «Era la persona clave»
Joan Laporta se emociona en la despedida a Eduard Romeu, vicepresidente económico que le ha presentado su dimisión
Con lágrimas en los ojos, Joan Laporta ha despedido en una comparecencia pública a Eduard Romeu, hasta este jueves vicepresidente económico del Barcelona, quien ha presentado su dimisión en lo que es una baja más en la directiva del equipo culé. Sin embargo, ambos han explicado que es una decisión «personal y vital» que se debe a nuevas «ocupaciones profesionales».
Laporta asume el golpe del que era una de sus pieza clave en la directiva del Barcelona. Así lo reconoció el propio presidente del Barça, que tildó a Romeu de «la persona clave en el rescate económico del Barcelona». Y por eso se emocionó al despedir a uno de sus principales colaboradores.
«Tengo que hablar de agradecimiento por tu categoría y calidad humana. Estamos seguros que si lo necesitamos tendremos tu consejo y apoyo», dijo un Laporta que repitió en varias ocasiones que Eduard Romeu ha sido una «pieza clave» en su directiva: «Estoy agradecido por reducir estos 200 millones que de forma crónica la entidad iba perdiendo cada año».
Si bien ambas partes, presidente y ya ex vicepresidente económico, se dan abrazos y agradecimientos, el golpe para Joan Laporta es enorme. Así lo demostró el propio dirigente azulgrana en una comparecencia sin preguntas en la que se le vio tocado por esta baja inesperada.
Joan Laporta pierde a otro directivo
Con esta marcha, Joan Laporta cada vez tiene más fugas justo cuando se cumplen tres años de su regreso a la presidencia del Barcelona. El último, confirmado este jueves, ha sido Eduard Romeu, pieza clave en el engranaje financiero culé al ser hasta ahora vicepresidente económico.
Romeu apareció junto a Laporta en una intervención sin preguntas y justificó su marcha porque tiene «otras ocupaciones profesionales». «Han sido dos años y medio intensos estando al 200 por ciento en el Barcelona. A veces sólo salía para ducharme. He estado full al Barcelona», explicó el ya ex vicepresidente económico del Barcelona.
«Nunca estaré suficientemente agradecido a Laporta por dejarme servir al club desde dentro. Es una experiencia maravillosa», continuó Eduard Romeu, que dejó claro que no tiene ningún problema con el presidente del Barça sino que quiere «arrancar nuevos proyectos y eso tiene mucha complejidad».
Para Eduardo Romeu «las palancas nos han ayudado a ganar tiempo» y asegura dejar «el trabajo hecho» ya que al equipo económico culé solo le quedará «acabar de ajustar los 200 millones de euros que el club venía perdiendo en el pasado».
«El enemigo está fuera», comentó también Romeu en el habitual discurso victimista que dirige Laporta. «Cuando empezamos esto parecía que ni había nadie que pudiese salvar esto, pero la valentía que nos ha transmitido Laporta nos ha permitido luchar», añadió.
El Barça no encuentra la tranquilidad
Pese a la clasificación a cuartos de la Champions League, lo que además de un objetivo deportivo cumplido supone un respiro económico, las cosas no se tranquilizan en un Barcelona al que el presidencialismo total de Laporta le empieza a pasar factura.
La dimisión de Eduard Romeu se une al reguero de abandonos que ha sufrido la directiva de Laporta en los últimos tiempos. Y no parece tener fin ya que cada mes o dos meses alguien se baja del barco. La anterior a Romeu fue Maribel Meléndez, directora general corporativa del club hasta el mes pasado.
Meléndez, también del entorno más cercano de Laporta (fue incluso quien contestó a Hacienda cuando le requirieron explicaciones por los pagos a Negreira), dejó el cargo alegando motivos personales. Este es el motivo que justifican prácticamente todos los que abandonan a Laporta. Meléndez era además una figura clave en el denominado Espai Barça, el proyecto de remodelación del Camp Nou.