Guerra fría entre Neymar y Mbappé en el PSG
Ha estallado la guerra, de momento fría, en el vestuario del PSG. Neymar y Mbappé protagonizan su particular pelea de gallos por el trono de París, con Messi de estrella invitada. La escena del penalti del pasado sábado ante el Montpellier, con el brasileño negando al francés su derecho a lanzar tras haber fallado uno antes, es sólo la punta de un iceberg que puede llevarse por delante al titánico trasatlántico del estado de Qatar.
Neymar ha sido el jefe del PSG desde que llegó en el verano de 2018 (al mismo tiempo que Mbappé) con la vitola de ser el fichaje más caro de la historia del fútbol. Aquellos 225 millones de euros dieron la vuelta al «se queda» en Barcelona y también dieron con los huesos de Ney en París. Sus inoportunas lesiones, casi todas provocadas por entradas de rivales, han opacado sus imponentes números en el PSG hasta el punto de que Mbappé le ha bajado de su silla.
Con su multimillonaria renovación tras romper su acuerdo con el Real Madrid, Mbappé no es el príncipe del parque del PSG es el rey absoluto. No necesita que en su contrato ponga que tiene que lanzar los penaltis, se sobreentiende. En París, mejor dicho, en Qatar, le prometieron que sería el líder indiscutible del proyecto del club y que harían lo posible para que ganara todos los títulos, los individuales y los colectivos. De la Champions al Balón de Oro.
La división del vestuario del PSG
Por eso el vestuario del PSG asiste como testigo a la guerra fría entre Mbappé y Neymar, que ha empezado la temporada como un tiro. Galtier, el técnico que ha relevado a Pochettino, quiere tener a sus dos gallos listos para la pelea pero no entre ellos sino contra los rivales. Pero Galtier también tiene claro quién es su jugador franquicia: Mbappé. Por eso zanjó la polémica sobre quién debe tirar los penaltis en el PSG y le puso el nombre de Kylian y el apellido de Mbappé.
Neymar calla y juega. Muy bien, por cierto. Mientras, la plantilla está dividida entre los que apoyan al brasileño y los que tienen más sintonía con el francés. Una especie de lucha de clanes en un vestuario plagado de egos y que puede explotar en cualquier momento, sobre todo cuando vengan mal dadas a lo largo de la temporada.
Neymar y Mbappé, Mbappé y Neymar, dirimirán sus diferencias como rivales también en el césped y lo harán precisamente en Qatar. Ambos están llamados a liderar a las dos mejores selecciones del Mundial, Francia y Brasil, Brasil y Francia. Será precisamente ante los dueños del PSG donde Neymar y Mbappé podrán convertir su guerra fría en guerra abierta.