Un gol de Rashford en el 92 mantiene a Mou con pleno de victorias
El Manchester United consiguió su tercera victoria en tres partidos en la presente edición de la Premier League pero no sin sufrimiento. Un gol del canterano Rashford en el descuento bastó para culminar un buen partido de los de Mourinho.
El choque transcurrió, desde el inicio, en el campo del Hull City. Dominio absoluto del Manchester United al menos territorialmente aunque a los de Mourinho les ha costado crear ocasiones realmente peligrosas. Eso sí, al igual que en las dos primeras jornadas, y a diferencia del año pasado, el United se comporta en el campo como un equipo grande: domina, tiene la posesión, marca el ritmo del partido, crea ocasiones y no concede llegadas del rival con facilidad.
Pero el talento que acumulan los ‘red devils’ de centro del campo hacia adelante no ha sido suficiente y se nota que aún falta compenetración entre los jugadores de ataque. Esto es, Pogba, Valencia, Mata, Rooney, Ibrahimovic, Martial, etc. no terminan de entenderse y de ahí las dificultades para crear ocasiones de peligro.
Por su parte, el conjunto de Yorkshire se sentía cómodo en su rol de equipo pequeño, dejando hacer el United y esperando su oportunidad a la contra. Y oportunidades tuvo para hacerlo aunque todas se perdieron en disparos lejanos que no supusieron ningún problema para el cancerbero español, David de Gea.
El United seguía a lo suyo. Casi todo el peligro que creaban los diablos rojos procedían de las bandas, bien Valencia o bien Martial, los dos jugadores más verticales en la primera parte. Ibrahimovic tuvo un par de remates a bocajarro que no acabó de culminar y Mata también lo intentó desde fuera del área pero su disparo se marchó desviado.
Tras el descanso, el encuentro no varió y Mourinho comenzó a buscar soluciones desde el banquillo. Dio entrada a Rashford y a Mkhitaryan en busca de más gol (uno de los sacrificados fue Mata) y el United atacó con más corazón que cabeza, basándose en individualidades. Pogba demostró galones dentro del vestuario al lanzar una falta propicia para Ibrahimovic o Rooney, que se marchó por poco a la izquierda de la portería del Hull City.
Los minutos pasaban y los de Manchester empujaban y empujaban ante un rival que ya renunciaba completamente a salir al ataque y solo podía defenderse ante las continuas llegadas del United. Y, tanto fue el cántaro a la fuente que, en el minuto 92, Rashford aprovechó un gran jugada individual de Rooney para marcar el gol que le dio la tercera victoria a los de Mourinho en la Premier.
El United dominó, ganó con justicia pero dejó algunas lagunas en su juego, algo que el técnico portugués debe mejorar para no pasar tantos apuros como hoy ante rivales claramente inferiores.