Futbolistas de papá (II): la maldición del apellido

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Jordi Cruyff controla un balón en un partido con el United ante la entrada de Gravesen (Getty)
Miguel Serrano
  • Miguel Serrano
  • Me confundieron con un joven prodigio pero acabé de periodista. Escribo cosas de deportes y del Real Madrid en OKDIARIO, igual que antes las escribía en Marca. También a veces hablo por la radio y casi siempre sin decir palabrotas. Soy bastante tocapelotas. Perdonen las molestias.

Igual que muchos futbolistas honraron a sus padres y consiguieron elevar el nombre de la familia a cotas desconocidas, a otros sencillamente el peso del apellido les aplastó las ilusiones y demostraron estar muy lejos de la leyenda que escribieron sus padres. Los más grandes de la historia del fútbol no tuvieron hijos a la altura. Pelé, Maradona, Beckenbauer, Cruyff, Francescoli… Estos son los futbolistas de papá que no superaron la maldición del apellido:

Edinho Pelé

Como si de un mal chiste se tratara, al hijo de O Rei le dio por jugar de portero y llegó a militar en el Santos de Brasil, más por el peso del apellido de su padre que por su propio talento. Su carrera quedó en casi nada, pero saltó a las portadas cuando en 2005 fue detenido por ser parte de una red de venta de drogas. Afortunadamente para el fútbol, acabó retirándose.

Diego Sinagra ‘Maradona Jr.’

El hijo italiano de Diego Armando Maradona actualmente tiene 29 años. Más allá de la polémica que se generó en torno a la paternidad del Pelusa, en sus inicios se creó una gran expectación sobre él. Se quedó en nada. A lo máximo que llegó en el fútbol fue a la Serie B italiana, aunque sí consiguió ganar una liga italiana de fútbol playa con el Napoli Beach Soccer.

Jordi Cruyff

Hijo del mítico Johan, Jordi Cruyff nunca pudo estar a la altura de su apellido, aunque sus dotes futbolísticas y el rebufo de su padre, por aquel entonces en el banquillo del Camp Nou, le valieron para jugar en clubes como el Manchester United o el Barcelona, aunque nunca llegó a honrar un apellido tan glorioso.

Stefan Beckenbauer

En las vitrinas de Franz Beckenbauer (Múnich, 1945) relucen tres Copas de Europa con el Bayern Múnich y dos Mundiales, uno como capitán de la selección germana y otro como entrenador. Pero a su hijo Stefan se le cayó encima el apellido. Jugó dos temporadas en el Bayern a mediados de los 80, pero no despuntó y acabó jugando en la segunda división alemana.

Marco Francescoli

Enzo Francescoli (Montevideo, 1961), apodado El Príncipe, es un mito viviente de la historia River Plate. El uruguayo no tiene en su palmarés ni Copas de Europa ni Mundiales, pero su leyenda va más allá de los números en frío. Francescoli fue el ídolo para una generación de futbolistas que soñaban con ser estrellas, entre ellos el mismísimo Zidane. Pero Marco, el hijo de Francescoli, no puede presumir de lo mismo. Tras una breve carrera en Argentina e Italia –ni siquiera llegó a debutar en primera–, dejó el fútbol para retomar sus estudios.

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