El CSKA se proclama campeón de la Euroliga

El CSKA de Moscú logró su octavo título de la Euroliga tras superar al Anadolu Efes en un Final Four muy igualada en la que los turcos no fueron capaces de culminar una remontada que se barruntó en los últimos instantes. Encabezados por Higgins y Clyburn, ambos con 20 puntos, los rusos acabaron con la maldición de un equipo que de haber perdido se habría desmantelado.

Los 29 puntos de Shane Larkin no fueron suficientes para poder detener al poderío ruso. El talento de De Colo y Sergio Rodríguez fueron suficientes para que el mayor presupuesto de Europa atase el partido en los nerviosos minutos finales.

El partido comenzó con un CSKA desatado. Los rusos se relamieron con el planteamiento ofensivo de un Anadolu Efes que sólo les aguantaba el pulso con un Larkin que parecía un islote. Higgins culminaba a la perfección el plan de Itudis en el primer periodo anotando 11 puntos en apenas seis minutos llegando a ganar por 20-29.

Las cosas se complicarían para los eslavos. Los verdugos del Real Madrid verían su ritmo parado en seco con el plan B del técnico Ataman repartiendo estopa en el segundo cuarto dejando la anotación del CSKA en apenas 15 puntos llegando a reducir la renta a dos puntos.

Las cosas volvieron a su sitio en el tercer cuarto. Pese a que el Anadolu Efes llegó a ponerse por delante, la maquinaría anotadora del CSKA se reactivo por medio de sus americanos con Clyburn y Higgins ametrallando desde la línea de tres puntos, mientras que Larkin se quedaba sólo ante el peligro.

El CSKA se llegó a ir por 14 puntos, pero encalló en sus rotaciones con un Sergio Rodríguez poco inspirado en la ofensiva. A los turcos les quitaron la soga del cuello y en un abrir y cerrar de ojos firmaron un parcial de 8-0 que dejó abierta la final a un cuarto para el término del duelo.

En el último periodo, los turcos llegaron a hostigar hasta recortar la distancia a cuatro puntos. Los aficionados del Fenerbahce, hasta entonces neutrales, empezaron a animar al equipo de Ataman. La respuesta del equipo ruso fue un parcial de 0-8 que parecía sentenciar el choque devolviendo la ventaja a los 12 puntos.

El Efes, sin embargo, tenía más vidas que un gato y picando piedra, defendiendo y jugando en equipo se volvió a poner a tiro de seis a dos minutos del partido. El CSKA, sin embargo, puso el cerrojo en defensa para sellar un triunfo merecido y que hace dudar acerca de si el Real Madrid –de no haberse suicidado– podría haber sido otra vez campeón.