El mejor truco para que los cristales de los faros de tu coche vuelvan a ser transparentes

Las inclemencias meteorológicas y el paso del tiempo hacen que los faros del coche queden amarillentos y opacos con el paso del tiempo. Esto provoca que disminuya su intensidad lumínica, poniendo en peligro tanto a los ocupantes del vehículo como al resto de usuarios de la vía cuando es de noche. A esto hay que sumar que muchos  faros modernos están fabricados con policarbonato, un material que se oxida por los cambios de temperatura y la luz del sol. Por suerte, existe un truco casero muy sencillo y efectivo para limpiar los faros del coche y dejarlos impecables. ¡Se vuelven transparentes como por arte de magia!

Lo que necesitas es: pasta de dientes, vinagre blanco, bicarbonato de sodio, jabón líquido y agua. Todos son productos fáciles de encontrar en cualquier supermercado. El proceso a seguir es el siguiente:

1. En primer lugar, vierte una taza de agua caliente en un recipiente.
2. Añade una cucharada de pasta de dientes, una de jabón y una de bicarbonato. Mezcla ambos ingredientes.
3. Agrega una cucharada de vinagre blanco con cuidado, ya que va a hacer una reacción efervescente.
4. Una vez lista la solución, comienza limpiando el faro con un trapo seco para eliminar la suciedad superficial.
5. Empapa una esponja suave en la solución y limpia la superficie con movimientos circulares.
6. Elimina el exceso de producto con un paño limpio.
7. Y, por último, seca con un trapo de microfibra para que no deje pelusas.

Como puedes comprobar, el truco para dejar los faros del coche transparentes no puede ser más fácil.

¿Cómo limpiar los faros del coche?

Además del truco de la pasta de dientes, hay otros remedios caseros que puedes poner en práctica para eliminar el color amarillento y la opacidad.

Uno de los que mejor funcionan es el de limón y bicarbonato, ya que tiene un gran poder desengrasante. Mezcla el zumo de un limón con una cucharada de bicarbonato, aplica con una esponja por el faro hasta cubrirlo por completo. Espera un par de minutos, elimina el exceso de producto con un paño limpio y seca. ¡Te sorprenderá el resultado!

El vinagre es uno de los productos de limpieza más utilizados en el hogar porque es muy efectivo para eliminar la grasa. Para dejar los faros del coche como nuevos, calienta un vaso de vinagre, sin que llegue a hervir. Pulveriza sobre los faros, deja que actúe cinco o diez minutos y retira con una esponja suave humedecida en una mezcla de agua y jabón. Finaliza secando con un trapo de microfibra.