Ryanair se mofa de Von der Leyen y culpa de los retrasos aéreos a los ministros de transporte de la UE
La campaña 'on-line' complementa las reiteradas críticas públicas de Ryanair a los servicios de ATC
Buenas noticias para los pasajeros de Ryanair: amplían el tamaño del equipaje de mano

Ryanair ha lanzado una nueva campaña satírica con una página web, a la que se puede acceder desde la página principal de la aerolínea, que señala a la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, y a los ministros de Transporte de los distintos países europeos, como responsables de los continuos retrasos en los vuelos que están generando descontento entre los clientes de la compañía irlandesa.
La aerolínea low cost ha dado un paso más en su estrategia de presión: ha estrenado la página Air Traffic Control Ruined Your Flight, donde el pasajero puede indicar cuál ha sido su vuelo retrasado y recibe de inmediato el nombre y correo electrónico del ministro de su país que es responsable de la cartera de transportes. La web de Ryanair anima a los afectados a quejarse y o hace con este contundente mensaje: «Acusa a tu ministro de los retrasos». Esta táctica pone de relieve, en clave irónica, la falta de acción de los gobiernos nacionales frente a la creciente crisis en los servicios de control aéreo (ATC).
Esta campaña on-line complementa, con datos, las reiteradas críticas públicas de Ryanair a los servicios de ATC. La compañía ha presentado su «League of Delays» correspondiente al mes de junio, donde pone en primer plano a Francia, España, Alemania, Portugal y el Reino Unido como los países con mayores retrasos por deficiente gestión y escasez de personal en los servicios ATC.
Según datos recogidos por Ryanair, el pasado 1 de junio se acumularon 5.000 horas de retraso en más de 34.000 vuelos, una elocuente cifra que describe la magnitud del problema.
El consejero delegado (CEO por sus siglas en inglés) de la aerolínea, Michael O’Leary, ha explicado que «los ATC nacionales conocen las programaciones de vuelos con un año de antelación, por lo que no hay excusa para no contar con personal suficiente, sobre todo en la primera ola de vuelos matinales que causa efecto dominó en el resto del día».
Además, O’Leary ha señalado que las huelgas de controladores aéreos franceses, definidas por Ryanair como «recreativas», han provocado la cancelación de cientos de vuelos y dejado a decenas de miles de pasajeros sin poder viajar a finales de junio y principios de julio.
Las consecuencias más recientes están expuestas en el informe sobre lo acontecido los pasados 3 y 4 de julio: la aerolínea detalla que 170 vuelos fueron cancelados, afectando a más de 30.000 pasajeros, debido a una huelga del ATC francés que, según denuncia la compañía, no protegió los sobrevuelos, es decir, aquellos vuelos que atraviesan el espacio aéreo de Francia sin despegar ni aterrizar en dicho país.
Igualmente, la empresa irlandesa ha exigido a Von der Leyen que intervenga urgentemente o dimita. Ryanair, si bien asume que el ATC es una competencia nacional, sostiene que proteger el mercado único del transporte aéreo es una obligación de la Comisión Europea, que hasta ahora no ha sido capaz de hacerlo.
La campaña de Ryanair
La nueva web de la compañía aérea parece diseñada para que el cliente o «pasajero frustrado» pueda formar parte de la campaña. Una vez que el pasajero ha indicado su vuelo afectado, se le propone una plantilla de correo electrónico para enviarlo al ministro de transporte de su país para pedir soluciones.
Así, Francia, España, Alemania, Reino Unido, Grecia y Portugal se encuentran entre los casos más señalados, cada uno con el nombre y dirección de su ministro correspondiente.
La campaña de Ryanair, que combina datos sobre cancelaciones y retrasos y un recurso digital, representa una fuerte crítica, que responsabiliza de forma directa a los ministros de transporte nacionales y a la Unión Europea.
La estrategia deja entrever una acusación: no se trata sólo de huelgas que se da en la compañía, sino de una falta de organización a nivel estructural en la gestión de los servicios ATC que, según la Ryanair, podría evitar la mayoría de los retrasos si se actuara con la planificación y los recursos adecuados.